No es el ‘Pibe’ samario de pases largos y precisos; tampoco el socio ideal para diseñar cualquier jugada de gol; pero sí el de la melena rubia que caracteriza al ídolo de Pescaito.

Fredy Sánchez Arboleda atrae las miradas de quienes asisten al Torneo Vacacional de Escuelas que organiza el Valledupar Fútbol Club. Su pelo no deja de moverse mientras las fuertes brisas decembrinas bajan de la sierra como queriéndole ‘coquetear’ al jugador de 12 años.

Hace parte del Club Nilmar de Maicao, en el que su voz de líder sobresale mientras rueda la redonda en el tradicional torneo vallenato.

Su juego no es el mismo que el del hijo de ‘Jaricho’ Valderrama pues Fredy ocupa la posición de zaguero y capitán, desde donde imparte seguridad y liderazgo a la hora de pararse en el terreno de juego.

“Yo no juego como ‘El Pibe’ pero sí me parezco a él, manejo bien la pelota pero desde mi posición de zaguero; tengo buena pegada”, aseguró el pequeño quien admira mucho a Vladimir Hernández del Junior de Barranquilla.

Mientras habla, su cabellara no deja de ondear como queriendo imitar gestos de Carlos Valderrama; al lado de él sus compañeros de equipo no dejan de ayudarlo a la hora de hablar de sus condiciones en la cancha.

En lo que sí coinciden es en el cuidado del cabello: “Yo me echo mucho champú de manzanilla, para que no se me dañe”, dijo el estudiante de séptimo grado del colegio Jorge Arrieta de Maicao.

Como todo niño de su edad quiere llegar al salón de la fama del fútbol mundial, por eso no deja de soñar en que algún día llegue a la Selección Colombia o a cualquier equipo de la Liga española de fútbol.

Con su equipo Nilmar de la población guajira, Fredy Sánchez se ha paseado victorioso por torneos realizados en Santa Marta y Barranquilla, por eso habla con autoridad y sin pelos en la lengua, tal como lo hace ‘El Pibe’ Valderrama cada vez que habla de fútbol para elogiar o criticar.

Por Nibaldo Bustamante