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Columnista - 13 diciembre, 2014

Plantón contra la inseguridad

German Ortiz Leyva, docente de ciencia política de la Universidad del Rosario, considera que la movilidad y la seguridad son los dos ejes que harán mover el voto de opinión en Bogotá y concluyó que la atención de estos desafíos debe acompañarse con políticas públicas que funcionen en el largo plazo. En efecto la inseguridad […]

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German Ortiz Leyva, docente de ciencia política de la Universidad del Rosario, considera que la movilidad y la seguridad son los dos ejes que harán mover el voto de opinión en Bogotá y concluyó que la atención de estos desafíos debe acompañarse con políticas públicas que funcionen en el largo plazo.
En efecto la inseguridad es un problema congénito de nuestra nación, su tratamiento coyuntural redunda en usufructo político, en el mismo sentido son ejecutadas las estrategias que proponen soluciones. Las razones de la inseguridad son multicausales, el premio Nobel de Economía, Joseph Stigtliz, considera que existe una relación entre economía y violencia, en ese sentido se deduce la invocación de políticas públicas.
La falta de oportunidades, la desigualdad y la cultura de la ilegalidad concibe inseguridad y la aparición de bandas criminales, este conjunto de irregularidades se mueven al ritmo de la gacela, mientras el aparato institucional lo hace a paso paquidérmico, circunstancia que genera incredulidad.
La inseguridad es un indicador colectivo que describe el clima social en que discurre la vida urbana en las ciudades, los habitantes de Valledupar lo padecen diariamente, acusan desconfianza de las autoridades al no interponer las denuncias respectivas y se quejan de la laxitud de la justicia. Es pertinente que la ciudadanía cambie el parecer con el fin de servir de apoyo a la autoridad, la Policía debe actuar conforme a su responsabilidad constitucional, porque de nada sirve la existencia de 28 cuadrantes, el mapa georeferenciado de la criminalidad anunciado por el alcalde Fredy Socarras, las cámaras de seguridad, el apoyo ciudadano, la dotación en medios tecnológicos y de movilidad; si continúan pasivos y no hacen presencia e inteligencia, la estrategia “Vamos por ellos” es un chiste para los delincuentes.
La falta de autoridad y permisividad de la Administración Municipal y de la Policía concibe la generación de delitos, el panorama de la delincuencia en Valledupar es temerario y progresivo, los atracos en vía pública siguen en ascenso: de 910 en 2012 a 984 casos en 2013, en el mismo periodo el hurto de automóviles y motos pasó de 71 a 128 y de 271 a 576, respectivamente. Así mismo, la tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes pasó de 24 en 2012 a 25 en 2013. (Departamento de Policía Cesar).
La ciudadanía de Valledupar respira inseguridad y temor, agobiada por la situación y con fundamento en sus derechos constitucionales decidió convocar para el próximo 17 de diciembre un plantón contra la inseguridad, en aras de exigir a sus autoridades diligencia y efectividad. Para sumarme al plantón desde esta tribuna remito algunas estrategias que considero útiles para enfrentar la delincuencia: patrullaje e inteligencia, crear un bloque de búsqueda para desmantelar las bandas y las ollas de microtráfico, blindar con el ejército las entradas de la ciudad, crear frentes de seguridad en los barrios y utilizar sirenas o alarmas como medio persuasivo conectadas al CAI más cercano. No faltará apoyo ciudadano en la medida que la institucionalidad responda y muestre resultados en torno a la delincuencia, el plantón ciudadano es muestra de ello.
@LuchoDiaz12

Columnista
13 diciembre, 2014

Plantón contra la inseguridad

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Luis Elquis Diaz

German Ortiz Leyva, docente de ciencia política de la Universidad del Rosario, considera que la movilidad y la seguridad son los dos ejes que harán mover el voto de opinión en Bogotá y concluyó que la atención de estos desafíos debe acompañarse con políticas públicas que funcionen en el largo plazo. En efecto la inseguridad […]


German Ortiz Leyva, docente de ciencia política de la Universidad del Rosario, considera que la movilidad y la seguridad son los dos ejes que harán mover el voto de opinión en Bogotá y concluyó que la atención de estos desafíos debe acompañarse con políticas públicas que funcionen en el largo plazo.
En efecto la inseguridad es un problema congénito de nuestra nación, su tratamiento coyuntural redunda en usufructo político, en el mismo sentido son ejecutadas las estrategias que proponen soluciones. Las razones de la inseguridad son multicausales, el premio Nobel de Economía, Joseph Stigtliz, considera que existe una relación entre economía y violencia, en ese sentido se deduce la invocación de políticas públicas.
La falta de oportunidades, la desigualdad y la cultura de la ilegalidad concibe inseguridad y la aparición de bandas criminales, este conjunto de irregularidades se mueven al ritmo de la gacela, mientras el aparato institucional lo hace a paso paquidérmico, circunstancia que genera incredulidad.
La inseguridad es un indicador colectivo que describe el clima social en que discurre la vida urbana en las ciudades, los habitantes de Valledupar lo padecen diariamente, acusan desconfianza de las autoridades al no interponer las denuncias respectivas y se quejan de la laxitud de la justicia. Es pertinente que la ciudadanía cambie el parecer con el fin de servir de apoyo a la autoridad, la Policía debe actuar conforme a su responsabilidad constitucional, porque de nada sirve la existencia de 28 cuadrantes, el mapa georeferenciado de la criminalidad anunciado por el alcalde Fredy Socarras, las cámaras de seguridad, el apoyo ciudadano, la dotación en medios tecnológicos y de movilidad; si continúan pasivos y no hacen presencia e inteligencia, la estrategia “Vamos por ellos” es un chiste para los delincuentes.
La falta de autoridad y permisividad de la Administración Municipal y de la Policía concibe la generación de delitos, el panorama de la delincuencia en Valledupar es temerario y progresivo, los atracos en vía pública siguen en ascenso: de 910 en 2012 a 984 casos en 2013, en el mismo periodo el hurto de automóviles y motos pasó de 71 a 128 y de 271 a 576, respectivamente. Así mismo, la tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes pasó de 24 en 2012 a 25 en 2013. (Departamento de Policía Cesar).
La ciudadanía de Valledupar respira inseguridad y temor, agobiada por la situación y con fundamento en sus derechos constitucionales decidió convocar para el próximo 17 de diciembre un plantón contra la inseguridad, en aras de exigir a sus autoridades diligencia y efectividad. Para sumarme al plantón desde esta tribuna remito algunas estrategias que considero útiles para enfrentar la delincuencia: patrullaje e inteligencia, crear un bloque de búsqueda para desmantelar las bandas y las ollas de microtráfico, blindar con el ejército las entradas de la ciudad, crear frentes de seguridad en los barrios y utilizar sirenas o alarmas como medio persuasivo conectadas al CAI más cercano. No faltará apoyo ciudadano en la medida que la institucionalidad responda y muestre resultados en torno a la delincuencia, el plantón ciudadano es muestra de ello.
@LuchoDiaz12