Las quemaduras que Olger David Tapias Ovallos, de 21 años, sufrió en el 90% del cuerpo le provocaron la muerte, a las 2:00 de la madrugada de ayer, en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Rosario Pumarejo de López.
Este joven es la segunda víctima fatal del accidente de tránsito registrado el pasado martes, cuando al carro cargado de gasolina de contrabando que él conducía, quedó envuelto en llamas luego de salirse de la carretera por el estallido de una llanta en inmediaciones del corregimiento El Desastre, sobre la vía San Diego- Codazzi. Ese día murió calcinado un menor de 14 años que lo acompañaba.
“Por la magnitud del accidente la piel la tenía muy sensible, entró en paro y no pudieron reanimarlo”, contó Rafael Tapias en las afueras de Medicina Legal y Ciencias Forenses, donde adelantaba los trámites para reclamar el cadáver de su hijo.
Explicó que durante los dos años y medio que tenía su hijo de trabajar en el contrabando de gasolina venezolana, no había tenido ningún incidente.
“Esto nos tomó por sorpresa, él lucho hasta lo último pero no hubo posibilidades”, dijo el angustiado padre.
El féretro de Tapias Ovallos fue trasladado a su residencia en el barrio El Juguete de Codazzi, donde hoy familiares y amigos le darán el último adiós.

La otra víctima
El día del accidente, Juan David Iguarán Núñez, de 14 años, murió calcinado al quedar atrapado en el vehículo que transportaba combustible de contrabando, en el que viajaba de copiloto.

 
Por Redacción Judicial / EL PILÓN