La crisis de Salud en La Guajira es tema del orden nacional por la muerte de menores a causa de desnutrición.
La muerte de dos niños menores de edad, por desnutrición, en los últimos días y cinco más hospitalizados en diferentes centros asistenciales del departamento, por la misma causa, han encendido la polémica y nuevamente se pone en entredicho la efectividad de los programas sociales, que implementa la gobernación de la Guajira y el ICBF, para combatir este flagelo que afecta especialmente a la población indígena de La Guajira.
El exsecretario de salud de Maicao, el médico pediatra Abdul Raham Dasuki, hizo un fuerte cuestionamiento a estas entidades y expresó que la desnutrición de los recién nacidos y de las madres en estado de gestación, se debe a que estos programas no son integrales y no llegan donde tienen que llegar.
Con respecto a la muerte de los dos menores el pasado fin de semana, el profesional de la salud, indicó que un niño de cinco meses, proveniente de una ranchería indígena, fue atendido de emergencia en el hospital San José de Maicao y luego fue remitido a la unidad de cuidados intensivos de una clínica de San Juan del Cesar, donde falleció por el grave estado de desnutrición crónica en que se encontraba.
El otro caso también sucedió en Maicao, cuando un menor de 18 meses, proveniente del municipio de Albania, también murió por desnutrición severa presentando sangrado de encías y piel, y los galenos no pudieron hacer nada para salvarle la vida.
Según datos entregados por el Sistema Nacional de Vigilancia de Salud Pública, este año han muerto en La Guajira cinco niños, 47 han nacido con bajo peso y 6 más se encuentran recluidos en diferentes centros asistenciales, donde se les dan los cuidados necesarios y se les hace recuperación nutricional.
Estas muertes se suman a las 278 que se han registrado en los últimos seis años en La Guajira, según una denuncia en la Fiscalía interpuesta por el director de Planeación Departamental César Arismendi, con el objetivo de que no queden en la impunidad.
El funcionario también presentó una tutela por la muerte de 2.969 niños en La Guajira por esta y otras patologías y que se registraron entre 2008 y 2013 en el departamento.
Arismendi afirma que la inseguridad alimentaria y nutricional de las comunidades indígenas es un viejo problema con el cual se ha convivido por muchísimos años y que se agrava por el desabastecimiento que existe debido a las restricciones de Venezuela. “Hace parte de las patologías del departamento que no hemos sabido asumir con responsabilidad”, aseguró.
Fallas institucionales
El Secretario de Salud del departamento Jorge Juan Orozco, reconoce que hay fallas en la articulación de todos los actores que tienen que ver con esta problemática, e indicó que la culpa es de todos, especialmente de las E.P.S, que solo se preocupan por el balance financiero y no por aplicar políticas de P y P, promoción y prevención sobre todo en las comunidades indígenas de la alta Guajira que poco tienen acceso a los beneficios brindados en otras partes del departamento y es bueno que el país conozca la situación que se vive en esta región del país, expresó el funcionario.
Explicó que, “por ejemplo, al ICBF le falta hacer seguimiento a sus operadores, así como trabajar para mejorar en cobertura, mientras que las alcaldías y las empresas privadas trabajan por separado, sin articular esos esfuerzos”.
Esta situación quedó al descubierto cuando el pasado domingo un programa de televisión, de alta sintonía y al que, líderes indígenas trataron de impedir su emisión a través de una tutela, dio a conocer a nivel nacional esta problemática ahondando más en la crisis que afronta la salud en este departamento.
Por Jesús Eduardo Ariño Fragozo
La crisis de Salud en La Guajira es tema del orden nacional por la muerte de menores a causa de desnutrición.
La muerte de dos niños menores de edad, por desnutrición, en los últimos días y cinco más hospitalizados en diferentes centros asistenciales del departamento, por la misma causa, han encendido la polémica y nuevamente se pone en entredicho la efectividad de los programas sociales, que implementa la gobernación de la Guajira y el ICBF, para combatir este flagelo que afecta especialmente a la población indígena de La Guajira.
El exsecretario de salud de Maicao, el médico pediatra Abdul Raham Dasuki, hizo un fuerte cuestionamiento a estas entidades y expresó que la desnutrición de los recién nacidos y de las madres en estado de gestación, se debe a que estos programas no son integrales y no llegan donde tienen que llegar.
Con respecto a la muerte de los dos menores el pasado fin de semana, el profesional de la salud, indicó que un niño de cinco meses, proveniente de una ranchería indígena, fue atendido de emergencia en el hospital San José de Maicao y luego fue remitido a la unidad de cuidados intensivos de una clínica de San Juan del Cesar, donde falleció por el grave estado de desnutrición crónica en que se encontraba.
El otro caso también sucedió en Maicao, cuando un menor de 18 meses, proveniente del municipio de Albania, también murió por desnutrición severa presentando sangrado de encías y piel, y los galenos no pudieron hacer nada para salvarle la vida.
Según datos entregados por el Sistema Nacional de Vigilancia de Salud Pública, este año han muerto en La Guajira cinco niños, 47 han nacido con bajo peso y 6 más se encuentran recluidos en diferentes centros asistenciales, donde se les dan los cuidados necesarios y se les hace recuperación nutricional.
Estas muertes se suman a las 278 que se han registrado en los últimos seis años en La Guajira, según una denuncia en la Fiscalía interpuesta por el director de Planeación Departamental César Arismendi, con el objetivo de que no queden en la impunidad.
El funcionario también presentó una tutela por la muerte de 2.969 niños en La Guajira por esta y otras patologías y que se registraron entre 2008 y 2013 en el departamento.
Arismendi afirma que la inseguridad alimentaria y nutricional de las comunidades indígenas es un viejo problema con el cual se ha convivido por muchísimos años y que se agrava por el desabastecimiento que existe debido a las restricciones de Venezuela. “Hace parte de las patologías del departamento que no hemos sabido asumir con responsabilidad”, aseguró.
Fallas institucionales
El Secretario de Salud del departamento Jorge Juan Orozco, reconoce que hay fallas en la articulación de todos los actores que tienen que ver con esta problemática, e indicó que la culpa es de todos, especialmente de las E.P.S, que solo se preocupan por el balance financiero y no por aplicar políticas de P y P, promoción y prevención sobre todo en las comunidades indígenas de la alta Guajira que poco tienen acceso a los beneficios brindados en otras partes del departamento y es bueno que el país conozca la situación que se vive en esta región del país, expresó el funcionario.
Explicó que, “por ejemplo, al ICBF le falta hacer seguimiento a sus operadores, así como trabajar para mejorar en cobertura, mientras que las alcaldías y las empresas privadas trabajan por separado, sin articular esos esfuerzos”.
Esta situación quedó al descubierto cuando el pasado domingo un programa de televisión, de alta sintonía y al que, líderes indígenas trataron de impedir su emisión a través de una tutela, dio a conocer a nivel nacional esta problemática ahondando más en la crisis que afronta la salud en este departamento.
Por Jesús Eduardo Ariño Fragozo