Publicidad
Categorías
Categorías
Columnista - 17 enero, 2014

Las Listas listas y los Listos listos

Votantes que están tomando conciencia hoy, quieren que los atraigan con verdaderas propuestas, que los acompañen en momentos de calamidad, que estén con ellos en las buenas y en las malas; son los que dicen votaré por ese o esos candidatos porque muestran resultados y me han convencido.

Boton Wpp

Por Jairo Franco Salas

Vivimos una época de aspiraciones electorales, un panorama por cierto bastante saturado de listas por estos días, candidatos y candidatas visitan el norte, el sur, oriente y occidente de su región y país con el fin de conseguir los votos necesarios para ser elegidos (as), están en todo su derecho a elegir y ser elegidos: Art 40 C.N; llegan con discursos que conocen el lugar como la palma de su mano y traen las soluciones, que darían su vida y seis más por ellos, prometiendo esta vida y la otra, en su reuniones besan a Raimundo y todo el mundo, se toman fotos con todos, cargan niños, abrazan viejitos, aunque huelan mal, pero por un ratico.

Candidatos expresan sentirse como pez en el agua en sitios que consideran su fortín, porque conocen la problemática allí, pero realmente no expresan sus propuestas y cuando se les habla directamente de casos específicos, responden eso no es nada, se están ahogando en un vaso de agua, yo solucionaré eso cuando sea elegido, ¿cuándo les he incumplido? y la gente: Dr., Dra., este caso se lo planteamos hace 4 años, el candidato comienza a tartamudear es que, que…. Otros candidatos: voten por mí, sean optimistas, saliendo elegido le solucionaré todo eso, para eso estoy aquí, pasa el tiempo cando vuelven a aparecer, la gente dice de ellos ahí vienen los, mismos con las mismas.

Hablan de nueva renovación, ¿parece pleonasmo verdad?, me obliga necesariamente en este uno de mis escritos ineludibles a señalar que verdaderamente se necesita una renovación absoluta, de movimientos que sean independientes, que busquen interpretar a su electorado y procuren lograr intereses colectivos y no individuales. Dicen otros tener el potencial necesario, que vienen a proponer, a contribuir, por una renovación radical, que ahora sí, pero, el electorado se queda con una idea y los políticos con otra.

Los electores deben tener en su mente el perfil del candidato de sus preferencias y libre de presiones y emociones votar a conciencia, para dar nacimiento a un nuevo país, donde se vean realizados sus sueños pronto y no a futuras generaciones; no quieren votar por fantasmas que con discursos llegan a ilusionarlos, a entusiasmarlos, a explotar su fe como ciudadanos, que desapareciendo dicen van a estudiar, ¿a estudiar qué?, ¿será a aprender cursos de magia, de cómo desaparecer más rápido?

El electorado quiere que esos candidatos sean sinceros y comunes a ellos, no sentirse engañados, quieren escuchar proyectos realizables para su región, propuestas innovadoras y además que muestren que han hecho, que rindan cuentas con el objeto de cautivarlos.

Tienen razón todos esos candidatos de salir elegidos y aplicar esas frases de campaña como: El Cambio es Ahora, Renovando Ideas, Lo Imposible es Real, Siempre con la Verdad, Diciendo y Haciendo, Compromisos y Realidades, y otros más, este país tomaría otro rumbo, el cambio absoluto que requiere y de paso creer en una nueva clase política que refleje la necesidad del electorado. El voto es sagrado y no debe ser negociado por un posible puesto que es lo que más se promete y que no resulta, tejas, cemento, víveres, ron, hallacas, etc. Se dice que vender el voto es vender la conciencia.

Votantes que están tomando conciencia hoy, quieren que los atraigan con verdaderas propuestas, que los acompañen en momentos de calamidad, que estén con ellos en las buenas y en las malas; son los que dicen votaré por ese o esos candidatos porque muestran resultados y me han convencido.

Columnista
17 enero, 2014

Las Listas listas y los Listos listos

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Jairo Franco Salas

Votantes que están tomando conciencia hoy, quieren que los atraigan con verdaderas propuestas, que los acompañen en momentos de calamidad, que estén con ellos en las buenas y en las malas; son los que dicen votaré por ese o esos candidatos porque muestran resultados y me han convencido.


Por Jairo Franco Salas

Vivimos una época de aspiraciones electorales, un panorama por cierto bastante saturado de listas por estos días, candidatos y candidatas visitan el norte, el sur, oriente y occidente de su región y país con el fin de conseguir los votos necesarios para ser elegidos (as), están en todo su derecho a elegir y ser elegidos: Art 40 C.N; llegan con discursos que conocen el lugar como la palma de su mano y traen las soluciones, que darían su vida y seis más por ellos, prometiendo esta vida y la otra, en su reuniones besan a Raimundo y todo el mundo, se toman fotos con todos, cargan niños, abrazan viejitos, aunque huelan mal, pero por un ratico.

Candidatos expresan sentirse como pez en el agua en sitios que consideran su fortín, porque conocen la problemática allí, pero realmente no expresan sus propuestas y cuando se les habla directamente de casos específicos, responden eso no es nada, se están ahogando en un vaso de agua, yo solucionaré eso cuando sea elegido, ¿cuándo les he incumplido? y la gente: Dr., Dra., este caso se lo planteamos hace 4 años, el candidato comienza a tartamudear es que, que…. Otros candidatos: voten por mí, sean optimistas, saliendo elegido le solucionaré todo eso, para eso estoy aquí, pasa el tiempo cando vuelven a aparecer, la gente dice de ellos ahí vienen los, mismos con las mismas.

Hablan de nueva renovación, ¿parece pleonasmo verdad?, me obliga necesariamente en este uno de mis escritos ineludibles a señalar que verdaderamente se necesita una renovación absoluta, de movimientos que sean independientes, que busquen interpretar a su electorado y procuren lograr intereses colectivos y no individuales. Dicen otros tener el potencial necesario, que vienen a proponer, a contribuir, por una renovación radical, que ahora sí, pero, el electorado se queda con una idea y los políticos con otra.

Los electores deben tener en su mente el perfil del candidato de sus preferencias y libre de presiones y emociones votar a conciencia, para dar nacimiento a un nuevo país, donde se vean realizados sus sueños pronto y no a futuras generaciones; no quieren votar por fantasmas que con discursos llegan a ilusionarlos, a entusiasmarlos, a explotar su fe como ciudadanos, que desapareciendo dicen van a estudiar, ¿a estudiar qué?, ¿será a aprender cursos de magia, de cómo desaparecer más rápido?

El electorado quiere que esos candidatos sean sinceros y comunes a ellos, no sentirse engañados, quieren escuchar proyectos realizables para su región, propuestas innovadoras y además que muestren que han hecho, que rindan cuentas con el objeto de cautivarlos.

Tienen razón todos esos candidatos de salir elegidos y aplicar esas frases de campaña como: El Cambio es Ahora, Renovando Ideas, Lo Imposible es Real, Siempre con la Verdad, Diciendo y Haciendo, Compromisos y Realidades, y otros más, este país tomaría otro rumbo, el cambio absoluto que requiere y de paso creer en una nueva clase política que refleje la necesidad del electorado. El voto es sagrado y no debe ser negociado por un posible puesto que es lo que más se promete y que no resulta, tejas, cemento, víveres, ron, hallacas, etc. Se dice que vender el voto es vender la conciencia.

Votantes que están tomando conciencia hoy, quieren que los atraigan con verdaderas propuestas, que los acompañen en momentos de calamidad, que estén con ellos en las buenas y en las malas; son los que dicen votaré por ese o esos candidatos porque muestran resultados y me han convencido.