El 20 de febrero iniciarán las clases formales los niños, niñas y adolescentes de las zonas rurales y de difícil acceso del Cesar, que históricamente iniciaban  actividades académicas  en el mes de mayo.

Más de ocho mil menores  residentes en los municipios de Astrea, Aguachica, Codazzi, Becerril, Bosconia, Chimichagua, Chiriguaná, Curumaní, El Copey, La Gloria, La Jagua de Ibirico, La Paz, Pailitas, Pelaya, Pueblo Bello, Río de Oro, San Alberto y San Martín recibirán sus clases normales. La  Secretaría de Educación del Cesar,  deberá realizar un calendario especial que contenga estrategias para la recuperación de las clases y así ponerse al día con los estudios.

La Diócesis de Valledupar será la encargada de prestar los servicios educativos en estas zonas del Cesar, cuya contratación supera los 14 mil millones de pesos para brindarles a  los alumnos además del estudio, la alimentación escolar.

  “Muchos padres de familia, tienen la mala costumbre de no realizar el proceso de matrículas antes de terminar el año, siempre dejan para los meses de enero, febrero y marzo esta tarea, lo que genera retardo en los procesos de la cartera educativa”, manifestó el secretario de Educación Departamental, Juan Carlos Calderón Araújo.

 Para superar este comportamiento, la Secretaría de Educación visitó una a una las instituciones educativas y auditó los  procesos hasta superar el tope.