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General - 3 agosto, 2015

Wiwas de Becerril aún esperan ayudas

Para el 10 de agosto está programada una visita del Gobierno Nacional con el fin de darle solución a la problemática de los indígenas que bajaron de la Serranía de Perijá a la espera de ser reubicados.

Mientras esperan que lleguen las ayudas del Gobierno Nacional, los Wiwas permanecen hacinados en una casa comunal de Becerril, donde tienen que dormir unos sobre otros. EL PILÓN/Cortesía.
Mientras esperan que lleguen las ayudas del Gobierno Nacional, los Wiwas permanecen hacinados en una casa comunal de Becerril, donde tienen que dormir unos sobre otros. EL PILÓN/Cortesía.

Ya ha paso más de un mes desde que EL PILÓN conoció que 58 familias de la etnia Wiwa sufren por problemas de tierra, desnutrición y hacinamiento, donde 105 niños son los más afectados. Esto a causa de una disputa territorial con indígenas Yukpas que causó el desplazamiento del 90 % de las familias Wiwas, ubicadas en el resguardo Campo Alegre, en el municipio de Becerril. La comunidad salió del predio por amenazas y hoy sienten el abandono estatal al no encontrar soluciones para subsistir.

Hoy los indígenas Wiwas que por más 25 años se establecieron en unos terrenos de la Serranía de Perijá en Becerril, esperan que el Gobierno Nacional los ayude. Los terrenos en los que se ubicaron los Wiwas ancestralmente pertenecieron a los Yukpas, que ahora los reclaman y habían dado como último plazo hasta el 18 julio para que les devolvieran las 1.141 hectáreas que comprende el resguardo Campo Alegre, por lo que el pueblo Wiwa para evitar confrontación, se desplazó a Becerril, donde están hacinados, pasando hambre, en una casa comunitaria del barrio La Esperanza, a la espera que el Incoder les entregue las tierras prometidas en el municipio de El Molino, La Guajira.
Tras la denuncia lograron reunirse con la Procuradora Regional, el Defensor del Pueblo, la Alcaldía y Bienestar Familiar para mirar las acciones a tomar para ayudar al pueblo Wiwa y han recibido algunas ayudas, sin embargo no son suficientes y esperan que el Gobierno Nacional les brinde la solución.

Los Wiwas son un pueblo nativo de la Sierra Nevada de Santa Marta, pero por el conflicto armado que se vivió en la década de los 90 en el Cesar, parte de esta comunidad se desplazó hasta la Serranía de Perijá. En 1995, a través del entonces Incora, hoy Incoder, se les reconoció el resguardo a pesar de que era territorio tradicional de los Yukpas que ahora reclaman sus tierras.

Los Wiwas se sienten abandonados por el Estado, aseguraron que han buscado ayuda en la Alcaldía de Becerril, la Gobernación del Cesar, el Ministerio de Interior, Incoder, y hasta ahora no han tenido la colaboración necesaria.
El Incoder se comprometió con entregarles en el próximo mes de diciembre 572 hectáreas en el municipio de El Molino, La Guajira, y otras en 2016, con el fin de poder ser reubicados y devolverles los predios a los Yukpas, mientras tanto los Wiwas siguen viviendo en condiciones precarias y piden la intervención del Ministerio del Interior.

El personero de Becerril, Juan Manuel Pizarro dijo que para el 10 de agosto se tiene programada la visita del Ministerio del Interior, que desplazará a sus funcionarios de Asuntos Étnicos a dicho municipio, con el fin de darle solución a la problemática del pueblo Wiwa que espera ser reubicado. Así mismo se contará con la presencia del Incoder para analizar el avance del proceso para la compra de las tierras.
El funcionario del Ministerio Público indicó que con esta visita se buscará agilizar todo el proceso de adjudicación de los predios, además de la entrega de semillas, herramientas y animales para que los Wiwas puedan continuar con sus vidas por fuera de su resguardo Campo Alegre, que abandonaron por ser un territorio ancestral Yukpa.

Andreina Bandera / EL PILÓN
[email protected]

General
3 agosto, 2015

Wiwas de Becerril aún esperan ayudas

Para el 10 de agosto está programada una visita del Gobierno Nacional con el fin de darle solución a la problemática de los indígenas que bajaron de la Serranía de Perijá a la espera de ser reubicados.


Mientras esperan que lleguen las ayudas del Gobierno Nacional, los Wiwas permanecen hacinados en una casa comunal de Becerril, donde tienen que dormir unos sobre otros. EL PILÓN/Cortesía.
Mientras esperan que lleguen las ayudas del Gobierno Nacional, los Wiwas permanecen hacinados en una casa comunal de Becerril, donde tienen que dormir unos sobre otros. EL PILÓN/Cortesía.

Ya ha paso más de un mes desde que EL PILÓN conoció que 58 familias de la etnia Wiwa sufren por problemas de tierra, desnutrición y hacinamiento, donde 105 niños son los más afectados. Esto a causa de una disputa territorial con indígenas Yukpas que causó el desplazamiento del 90 % de las familias Wiwas, ubicadas en el resguardo Campo Alegre, en el municipio de Becerril. La comunidad salió del predio por amenazas y hoy sienten el abandono estatal al no encontrar soluciones para subsistir.

Hoy los indígenas Wiwas que por más 25 años se establecieron en unos terrenos de la Serranía de Perijá en Becerril, esperan que el Gobierno Nacional los ayude. Los terrenos en los que se ubicaron los Wiwas ancestralmente pertenecieron a los Yukpas, que ahora los reclaman y habían dado como último plazo hasta el 18 julio para que les devolvieran las 1.141 hectáreas que comprende el resguardo Campo Alegre, por lo que el pueblo Wiwa para evitar confrontación, se desplazó a Becerril, donde están hacinados, pasando hambre, en una casa comunitaria del barrio La Esperanza, a la espera que el Incoder les entregue las tierras prometidas en el municipio de El Molino, La Guajira.
Tras la denuncia lograron reunirse con la Procuradora Regional, el Defensor del Pueblo, la Alcaldía y Bienestar Familiar para mirar las acciones a tomar para ayudar al pueblo Wiwa y han recibido algunas ayudas, sin embargo no son suficientes y esperan que el Gobierno Nacional les brinde la solución.

Los Wiwas son un pueblo nativo de la Sierra Nevada de Santa Marta, pero por el conflicto armado que se vivió en la década de los 90 en el Cesar, parte de esta comunidad se desplazó hasta la Serranía de Perijá. En 1995, a través del entonces Incora, hoy Incoder, se les reconoció el resguardo a pesar de que era territorio tradicional de los Yukpas que ahora reclaman sus tierras.

Los Wiwas se sienten abandonados por el Estado, aseguraron que han buscado ayuda en la Alcaldía de Becerril, la Gobernación del Cesar, el Ministerio de Interior, Incoder, y hasta ahora no han tenido la colaboración necesaria.
El Incoder se comprometió con entregarles en el próximo mes de diciembre 572 hectáreas en el municipio de El Molino, La Guajira, y otras en 2016, con el fin de poder ser reubicados y devolverles los predios a los Yukpas, mientras tanto los Wiwas siguen viviendo en condiciones precarias y piden la intervención del Ministerio del Interior.

El personero de Becerril, Juan Manuel Pizarro dijo que para el 10 de agosto se tiene programada la visita del Ministerio del Interior, que desplazará a sus funcionarios de Asuntos Étnicos a dicho municipio, con el fin de darle solución a la problemática del pueblo Wiwa que espera ser reubicado. Así mismo se contará con la presencia del Incoder para analizar el avance del proceso para la compra de las tierras.
El funcionario del Ministerio Público indicó que con esta visita se buscará agilizar todo el proceso de adjudicación de los predios, además de la entrega de semillas, herramientas y animales para que los Wiwas puedan continuar con sus vidas por fuera de su resguardo Campo Alegre, que abandonaron por ser un territorio ancestral Yukpa.

Andreina Bandera / EL PILÓN
[email protected]