Al mundo hoy lo preocupa la insoportable contaminación ambiental que ha llevado en grado sumo al cambio climático que hoy vivimos y al cual tenemos que adaptarnos con capacidad resiliente. Para tales efectos, la Agencia Internacional de la Energía (AIE), que es el organismo más importante del mundo para el análisis de aquellos recursos que el planeta usa todos los días para moverse sin parar, e integrada por los países más desarrollados, advirtió que desde el 2011 “La Tierra se encamina hacia un futuro energético  insostenible si no se toman medidas urgentes para optimizar los recursos disponibles”.

Con la anterior premisa, los expertos científicos de la citada Agencia, auguraron un incremento de un tercio de la demanda de energía para los próximos 25 años, hecho que indudablemente obligará a las naciones hacer inversiones grandes para evitar la escasez de recursos básicos y el peligro de aumento de las emisiones que, como dijimos antes, contribuyen al calentamiento global.

Lo que quiere este organismo es que el mundo le apueste como alternativa a que el viento, el sol y el calor se conviertan en las principales fuentes de energía para todo el mundo. Hoy solo el 25 % de la energía del mundo es alternativa. Pero según el grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC siglas en inglés), este deberá satisfacer el 80 % de las necesidades globales hacia el 2050.

Por su parte, la Agencia Internacional de Energía Renovable (Irena), dice que el desarrollo del sector de la energía renovable es inevitable ya que deberá desempeñar un papel determinante en la sostenibilidad.

Consideramos que el mundo para hacerse más vivible debe tener un objetivo para cumplir, y es que la energía y el agua sean más servicios públicos que fuente de lucro económico. La idea es que el uso de energías verdes se pueda multiplicar por 20. Para ello se reúnen dos razones: aprovechamiento de aquellos recursos que parecen inagotables como la fuerza del sol, que se agotará posiblemente dentro de cinco mil años y que la humanidad recibe gratuitamente y reducir la emisión de gases de efecto invernadero que hoy se produce por quemar petróleo y carbón. Además, optimizar el uso del agua que como en Colombia se utiliza para prender la mayoría de los bombillos a través de represas cada vez más cuestionadas por su impacto sobre los ecosistemas. Ya en Colombia tenemos experiencia de energía eólica en la alta Guajira con el funcionamiento de 15 aerogeneradores que aportan 19,5 megavatios al Sistema Interconectado Nacional.

NOTA: Hoy celebramos el día del agua, aunque todos los días debemos registrar con satisfacción el hecho de tener acceso a su uso, cuidémosla por siempre, se nos está agotando.

*Especialista en gestión ambiental