En el 2016 el diario EL PILÓN lideró la campaña de responsabilidad social ‘Miremos el río Cesar’ con el ánimo de generar conciencia entre los guajiros y cesarenses, autoridades y ciudadanos, para recuperar el cauce que recorre más de 280 kilómetros desde la Sierra Nevada, donde nace, hasta su desembocadura en la ciénaga de Zapatosa. […]
En el 2016 el diario EL PILÓN lideró la campaña de responsabilidad social ‘Miremos el río Cesar’ con el ánimo de generar conciencia entre los guajiros y cesarenses, autoridades y ciudadanos, para recuperar el cauce que recorre más de 280 kilómetros desde la Sierra Nevada, donde nace, hasta su desembocadura en la ciénaga de Zapatosa.
Hemos sido insistentes y persistentes con el seguimiento a las acciones que anunciaron las autoridades ambientales para tratar de mitigar el impacto ambiental que tiene este cauce simbólico del Cesar.
Nos hemos convertido en el veedor natural del río y no cejaremos ni un centímetro para hacer visible lo que ocurra alrededor del Cesar. Por eso lanzamos voces de alerta con lo que ocurre hoy en el contrato firmado entre Emdupar y la Unión Temporal Planta de Aireación 2017, por valor de 2.644 millones, el cual tiene una ejecución del 14 %.
El llamado de atención lo hizo la interventoría de dicho contrato, firmado el 16 de marzo de 2017, con el objeto de diseñar y construir una planta de aireación para el mejoramiento de la capacidad de autodepuración del río Cesar. Su alerta consiste en que van pocos avances en los seis meses que lleva de ejecución, con un anticipo de casi mil millones de pesos.
El contralor del municipio de Valledupar, Omar Contreras, también denunció una posible falsificación en los documentos que soportan la experiencia de la firma contratista, y aunque no se ha comprobado que así sea, es mejor prevenir que lamentar.
Emdupar y Corpocesar deben seguir atentos y vigilantes para que el contratista cumpla con lo acordado, porque no se debe permitir que esos dineros tan esperados para tratar de descontaminar al río Cesar, se conviertan en una ejecución paquidérmica, con prórrogas, adiciones e incumplimientos, como ocurre en millonarios proyectos que se ejecutan en el Cesar.
El tema del medio ambiente es una prioridad y debería tener más dolientes. Invitamos a los organismos no gubernamentales que trabajan por los temas ambientales, a los estudiantes de ingeniería ambiental de la Universidad Popular del Cesar a que hagan veeduría a las inversiones que actualmente se hacen en el río Cesar.
Celebramos el Comité Técnico que realizó el pasado 29 de septiembre el director de Corpocesar, Kaleb Villalobos Brochel; el gerente de Emdupar, Armando Cuello Daza, y el Interventor del proyecto, Jorge Mazenett Flórez, para hacerle seguimiento a los avances del diseño y construcción de la planta de aireación. Si el contratista no ha cumplido, se deben tomar acciones a corto plazo para garantizar que su ejecución se haga bien y en los plazos.
En el 2016 el diario EL PILÓN lideró la campaña de responsabilidad social ‘Miremos el río Cesar’ con el ánimo de generar conciencia entre los guajiros y cesarenses, autoridades y ciudadanos, para recuperar el cauce que recorre más de 280 kilómetros desde la Sierra Nevada, donde nace, hasta su desembocadura en la ciénaga de Zapatosa. […]
En el 2016 el diario EL PILÓN lideró la campaña de responsabilidad social ‘Miremos el río Cesar’ con el ánimo de generar conciencia entre los guajiros y cesarenses, autoridades y ciudadanos, para recuperar el cauce que recorre más de 280 kilómetros desde la Sierra Nevada, donde nace, hasta su desembocadura en la ciénaga de Zapatosa.
Hemos sido insistentes y persistentes con el seguimiento a las acciones que anunciaron las autoridades ambientales para tratar de mitigar el impacto ambiental que tiene este cauce simbólico del Cesar.
Nos hemos convertido en el veedor natural del río y no cejaremos ni un centímetro para hacer visible lo que ocurra alrededor del Cesar. Por eso lanzamos voces de alerta con lo que ocurre hoy en el contrato firmado entre Emdupar y la Unión Temporal Planta de Aireación 2017, por valor de 2.644 millones, el cual tiene una ejecución del 14 %.
El llamado de atención lo hizo la interventoría de dicho contrato, firmado el 16 de marzo de 2017, con el objeto de diseñar y construir una planta de aireación para el mejoramiento de la capacidad de autodepuración del río Cesar. Su alerta consiste en que van pocos avances en los seis meses que lleva de ejecución, con un anticipo de casi mil millones de pesos.
El contralor del municipio de Valledupar, Omar Contreras, también denunció una posible falsificación en los documentos que soportan la experiencia de la firma contratista, y aunque no se ha comprobado que así sea, es mejor prevenir que lamentar.
Emdupar y Corpocesar deben seguir atentos y vigilantes para que el contratista cumpla con lo acordado, porque no se debe permitir que esos dineros tan esperados para tratar de descontaminar al río Cesar, se conviertan en una ejecución paquidérmica, con prórrogas, adiciones e incumplimientos, como ocurre en millonarios proyectos que se ejecutan en el Cesar.
El tema del medio ambiente es una prioridad y debería tener más dolientes. Invitamos a los organismos no gubernamentales que trabajan por los temas ambientales, a los estudiantes de ingeniería ambiental de la Universidad Popular del Cesar a que hagan veeduría a las inversiones que actualmente se hacen en el río Cesar.
Celebramos el Comité Técnico que realizó el pasado 29 de septiembre el director de Corpocesar, Kaleb Villalobos Brochel; el gerente de Emdupar, Armando Cuello Daza, y el Interventor del proyecto, Jorge Mazenett Flórez, para hacerle seguimiento a los avances del diseño y construcción de la planta de aireación. Si el contratista no ha cumplido, se deben tomar acciones a corto plazo para garantizar que su ejecución se haga bien y en los plazos.