El pasado 29 de junio nuestro Jefe de Redacción, Martín Mendoza, viajó al municipio de Becerril, en el centro del Cesar, para conocer la situación que se vivía en la población por cuenta de una emergencia ambiental originada por un escape de gasolina.

A primera vista parecía una queja más de la comunidad, que poco a poco fue tomando tonalidades diferentes, pues se trataba de una filtración del combustible que afecta a dos barrios del municipio. La situación fue publicada en nuestra sección Tema del Día y posteriormente con el debido seguimiento periodístico hemos informado los aspectos que han rodeado la emergencia que aún sigue vigente en esta población.

Después de la publicación se activó el Consejo Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres, con la participación de las autoridades que la conforman, viajaron a Becerril funcionarios para conocer el caso y declararon la alerta naranja porque no saben todavía cuál es la dimensión de la filtración que al parecer proviene de dos estaciones de gasolina, que vierten la gasolina al sistema de alcantarillado.

La Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, informó que propuso acciones para identificar el origen de la posible fuga de combustible de gasolina que se vierte al alcantarillado aledaño a las estaciones de servicio, y buscarán un explosímetro para medir la concentración de gases y vapores en el área de la contingencia, lo que llevará a prevenir riesgos de desastre que se puedan presentar.

El tema que comenzó hace más de cuatro meses con una incomodidad comunitaria por el fuerte olor y las pruebas que hacían en los manjoles con fuego, terminó en un caso serio, que solo al informarse a través de los medios de comunicación recibió la atención respectiva.

El caso de Becerril es una buena lección de prevención, porque se supone que las estaciones de servicios deben cumplir con controles, debido a los riesgos que representan los tanques de almacenamiento. Por lo pronto han tomado varias medidas, como la medida preventiva que puso el Consejo de Gestión del Riesgo a las EDS que suspendieron la comercialización para minimizar riesgos de incendios.

Hoy todos los ojos están puestos en Becerril, donde hay alerta naranja declarada por la Oficina de Gestión del Riesgo y Atención de Desastres, la cual seguirá vigente por la gravedad de la situación. La Empresa Colombiana de Petróleos S.A y al Ministerio de Minas y Energía fueron requeridas incluso para reforzar las acciones y detectar dónde es la filtración, la dimensión de la afectación y los riesgos, si los hay.

Resaltamos la labor de la Secretaría de Ambiente, la Alcaldía del municipio de Becerril, Unidad de Gestión del Riesgo, Cuerpo de Bomberos de La Jagua de Ibirico, Cruz Roja Colombiana, Ejército Nacional, Policía Nacional y propietarios de las EDS Becerril, Heliconia y La Paletilla, que han estado en permanente actividad desde que se visibilizó el problema.