Las vías de hecho no son siempre la mejor opción y aunque si son efectivas para llamar la atención de las autoridades, no garantizan que los problemas se resuelvan. Hace unas semanas los transportadores informales de pasajeros y carga de los corregimientos del norte de Valledupar pusieron el grito en el cielo por la instalación de un peaje en Río Seco, a escasos 14 kilómetros de la capital del Cesar.

Taparon la vía, protestaron y pensaron que habían resuelto el problema. Sin embargo, esta semana volvieron a paralizar la movilidad por esta carretera que le ha dado una dinámica diferente a la conectividad vial entre los departamentos del Cesar y La Guajira, porque el peaje por el que protestaban finalmente lo iban a instalar en el punto definido por la concesión y no donde ellos sugerían.

Paralelo a esta intranquilidad de parte de los transportadores, también surgió la molestia por los controles que hacen la Policía para exigirles que respeten las leyes. Aunque llevan años, décadas, transportando pasajeros entre los corregimientos y Valledupar, no están constituidos legalmente como empresas, violando la reglamentación vial.

Ayer se tomaron la plaza Alfonso López y parquearon sus vehículos sobre la mítica plaza para pedirle al alcalde Fredys Socarrás que los ayude a que la policía no les haga comparendos ni les inmovilice sus carros. El tema que para ellos se ha vuelto un gran problema es un asunto de legalidad, que quieran o no, deberán enfrentar.

Es hora de que los transportadores de los corregimientos del norte y del sur, y todas aquellas regiones a donde se movilizan pasajeros y cargas, se organicen en el marco de la legalidad para no dar a pie a la penosa y delicada situación que se presenta hoy con algunos agentes, que supuestamente cobran coima para no inmovilizarles los vehículos.

Aquí si hay que detenerse y mirar con lupa, señor comandante de la Policía en el Cesar, coronel Faiber Martínez, y señor secretario de Tránsito de Valledupar, Oscar Tom Socarrás, para que estos casos de corrupción no ocurran.

El alcalde Fredys Socarrás debe apoyar a los transportadores para que se organicen legalmente, y los líderes políticos y sociales para que encuentren un punto de equilibrio en los necesarios peajes en la vía Valledupar-San Juan del Cesar.