Inconformes se encuentran los residentes de los barrios Dundakare, Candelaria Norte y moradores del edificio Vari II tras el arrojo indiscriminados de basuras en su sector y la posterior quema de estas.

“No podemos sentarnos en las noches en las terraza de nuestras casas porque si no es el humo por la quema de las basuras, es la oscuridad la que nos impide hacerlo. Somos prisioneros en nuestro propio barrio”, dijo Óscar Aragón, residente del barrio de Dundakare.

La quema de los residuos a los que se refiere Óscar se dan a lo largo y ancho de los más de 10 lotes enmontados del sector. Carromuleros y otras personas inescrupulosas, no conforme con el arrojo de desechos en los mencionados lotes, ahora lo están haciendo también sobre la calle ubicada en la parte posterior de la Fundación Universitaria del Área Andina, generando dificultades para la entrada y salida a esta zona.

“Cada vez que voy a entrar a mí vivienda, me toca lidiar con basura, malos olores y ahora con la nube de humo que se genera con la quema de estas, pero la administración ni otra autoridad hacen algo al respecto”, manifestó, Marlene Ríos, habitante del barrio Dundakare.

Pero los dolores de cabeza de esta comunidad son más, falta alumbrado público que facilita la inseguridad y varias calles están sin pavimento.

“Esto es el norte de Valledupar, aunque esté aún en desarrollo el sector, pero caminar por las calles es otro cuento, parece un barrio de escasos recursos. Ojalá pronto llegue la pavimentación, supongo que al pavimentar instalarán luminarias y bueno los lotes poco a poco pasarán a ser hermosas viviendas”, comentó Fredesminda Polo, residente del barrio Candelaria Norte.

Con el rosario de quejas que presenta la comunidad al norte de Valledupar, hacen un llamado a la administración municipal para que no “eche en saco roto” sus peticiones y mire más hacia este sector.

Puntos de vista

Enrique Luis Serrano.
“De noche el sector es bastante oscuro, los lotes que de forma aparente no tienen dueños se convierten en un peligro porque entran viciosos, uno ya ni sabe que puede encontrar en esos espacios baldíos. Según escuché este año van a pavimentar el barrio, esperemos que sea cierto”.

Natalia Carrillo.
“La situación tiende a ser molesta, me afecta mucho la quema de basuras, esto se presenta más que todo en las noches, yo cierro ventanas y puertas pero aun así uno siente ahogarse con tanto humo”.

Por Jennifer Polo / EL PILÓN