Desesperados están los feligreses de la parroquia San Pablo Apóstol de Valledupar, ubicada en el barrio Callejas, debido a que la vía de acceso al templo no ha podido ser pavimentada, está llena de piedras y arena.

Según manifiestan los asistentes a misa, la iglesia está muy bonita pero el acceso es muy peligroso y más para las personas de la tercera edad que llegan a la parroquia a orar.

“Esperamos poder asistir a la iglesia sin miedo de caernos, porque además la iluminación del lugar no es muy buena, vivimos con gripa y cuando llueve el barrial es impresionante”, manifestó una devota de San Pablo Apóstol.