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Editorial - 11 febrero, 2016

¿Quién regula los precios en Valledupar?

Las declaraciones del ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, sobre el aumento desmedido de los precios de los productos de la canasta familiar, especialmente en supermercados de grandes superficies, han despertado el interés del consumidor final frente a lo que está pagando por los alimentos en supermercados, en mercados públicos y en las tiendas de barrios. […]

Las declaraciones del ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, sobre el aumento desmedido de los precios de los productos de la canasta familiar, especialmente en supermercados de grandes superficies, han despertado el interés del consumidor final frente a lo que está pagando por los alimentos en supermercados, en mercados públicos y en las tiendas de barrios.

La sequía generada por el fenómeno de El Niño ha sido utilizada para todo, entre esas aumentar los precios de productos básicos, y aunque en parte tengan razón, es necesario que exista un control en la venta de los mismos.
La yuca, la papa, el cebollín, la cebolla, el ajo, entre otros, son productos a los que le han disparado los precios. En Valledupar pudimos corroborar esa situación al comparar precios entre supermercados de grandes superficies, el Mercado Público, Mercabastos y tiendas de barrios.

Los 200, 300, 500, 600 o hasta 1.000 pesos de diferencia del precio de un producto entre un sitio y otro, es un hueco que se le va haciendo al bolsillo de los consumidores que perciben que en la capital del Cesar no existe ningún tipo de control en este sentido. Incluso, en tiendas de barrios ubicadas en una misma manzana hay diferencias.

La Federación Nacional de Comerciantes, seccional Cesar, está de capa caída. No se le ha escuchado ningún tipo de pronunciamiento o alguna solicitud a las autoridades para evitar que se asalte en su buena fe al consumidor.

¿Quién defiende el bolsillo de los compradores vallenatos? La canasta familiar se ha encarecido y más de la cuenta por culpa de la sequía y ahora que ya comenzó la Cuaresma, época en la que muchos ciudadanos católicos, compran con más frecuencia pescado para cumplir con la creencia religiosa de no comer carne los viernes, qué tipo de control existirá para que el precio del pescado no esté por las nubes.

En la Alcaldía de Valledupar existe una dependencia encargada para controlar los precios y recibir las quejas de los consumidores, que depende de la Secretaría de Gobierno, pero su bajo perfil no le permite siquiera darse a conocer entre la ciudadanía. Mientras que la Cámara de Comercio de Valledupar ha hecho varias alianzas con la Superintendencia de Industria y Comercio para un fin parecido, pero todo queda en el aire, y aunque en Colombia la legislación comercial permite que exista libertad de precios en el marco de la normatividad, hoy los consumidores necesitan que alguien los defienda.

Editorial
11 febrero, 2016

¿Quién regula los precios en Valledupar?

Las declaraciones del ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, sobre el aumento desmedido de los precios de los productos de la canasta familiar, especialmente en supermercados de grandes superficies, han despertado el interés del consumidor final frente a lo que está pagando por los alimentos en supermercados, en mercados públicos y en las tiendas de barrios. […]


Las declaraciones del ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, sobre el aumento desmedido de los precios de los productos de la canasta familiar, especialmente en supermercados de grandes superficies, han despertado el interés del consumidor final frente a lo que está pagando por los alimentos en supermercados, en mercados públicos y en las tiendas de barrios.

La sequía generada por el fenómeno de El Niño ha sido utilizada para todo, entre esas aumentar los precios de productos básicos, y aunque en parte tengan razón, es necesario que exista un control en la venta de los mismos.
La yuca, la papa, el cebollín, la cebolla, el ajo, entre otros, son productos a los que le han disparado los precios. En Valledupar pudimos corroborar esa situación al comparar precios entre supermercados de grandes superficies, el Mercado Público, Mercabastos y tiendas de barrios.

Los 200, 300, 500, 600 o hasta 1.000 pesos de diferencia del precio de un producto entre un sitio y otro, es un hueco que se le va haciendo al bolsillo de los consumidores que perciben que en la capital del Cesar no existe ningún tipo de control en este sentido. Incluso, en tiendas de barrios ubicadas en una misma manzana hay diferencias.

La Federación Nacional de Comerciantes, seccional Cesar, está de capa caída. No se le ha escuchado ningún tipo de pronunciamiento o alguna solicitud a las autoridades para evitar que se asalte en su buena fe al consumidor.

¿Quién defiende el bolsillo de los compradores vallenatos? La canasta familiar se ha encarecido y más de la cuenta por culpa de la sequía y ahora que ya comenzó la Cuaresma, época en la que muchos ciudadanos católicos, compran con más frecuencia pescado para cumplir con la creencia religiosa de no comer carne los viernes, qué tipo de control existirá para que el precio del pescado no esté por las nubes.

En la Alcaldía de Valledupar existe una dependencia encargada para controlar los precios y recibir las quejas de los consumidores, que depende de la Secretaría de Gobierno, pero su bajo perfil no le permite siquiera darse a conocer entre la ciudadanía. Mientras que la Cámara de Comercio de Valledupar ha hecho varias alianzas con la Superintendencia de Industria y Comercio para un fin parecido, pero todo queda en el aire, y aunque en Colombia la legislación comercial permite que exista libertad de precios en el marco de la normatividad, hoy los consumidores necesitan que alguien los defienda.