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Columnista - 4 septiembre, 2013

¿Qué pasa con los suelos del Cesar?

Valledupar, Ciudad Ecológica de Colombia. Recuperemos y Conservemos las cuencas de los ríos Guatapuri y Cesar. Hagamos causa común para que el Embalse Los Besotes sea una realidad, es agua para vida en Valledupar, La Paz y San Diego.

Por Hernán Maestre Martínez

Valledupar, Ciudad Ecológica de Colombia. Recuperemos y Conservemos las cuencas de los ríos Guatapuri y Cesar. Hagamos causa común para que el Embalse Los Besotes sea una realidad, es agua para  vida en Valledupar, La Paz y San Diego.

La razón de ser de esta columna pedagógica y sensibilizadora sobre el medio ambiente, nos lleva en primera instancia al abordar este problema a definir las palabras Desertificación  y Desertización, no sin antes expresar que la difícil y preocupante situación en que se encuentran los suelos del Cesar nos llevan a recabar sobre el tema.

Por desertificación se entiende la degradación de las tierras, principalmente las secas (áridas, semiáridas y subhumedas), como resultado de la acción de factores antrópicos o humanos y la desertificación que se ocasiona por procesos naturales o biofísicos como por ejemplo, intensidad, frecuencia y duración de lluvias, presencia de fuertes vientos y altas pendientes.

Después de las anteriores definiciones, digamos que los ecosistemas secos se caracterizan por bajas precipitaciones o pocas lluvias, abundante oferta de energía solar y abastecimientos limitados de agua durante gran parte del año. 

Según el Plan de Acción Regional (PAR) para la Lucha Contra la Desertificación y el Manejo de Ecosistemas Secos en el Departamento del Cesar elaborado por Corpocesar y el IDEAM en el 2007; el Cesar posee 950.716 hectáreas de ecosistemas secos (42%) del departamento, de las cuales 613.795 hectáreas se encuentran en diferentes niveles de desertificación, siendo critica su presencia en los municipios de El Paso, Astrea, Valledupar, Bosconia, La Paz, Becerril, Agustín Codazzi, El Copey, Chiriguaná y González.

Las causas  más importantes en la desertificación son:

  • La falta de conocimiento y educación sobre los usos y manejos sostenibles de los ecosistemas.
  • La transformación y deterioro de las coberturas vegetales como producto de la deforestación, quemas incontroladas.
  • El uso de tecnologías no aptas.
  • Sistemas productivos y de explotación de los recursos no acordes con las características de los suelos.

Las principales consecuencias de la desertificación son:

  • Pérdida de la cobertura vegetal, la biodiversidad y degradación del agua.
  • Degradación de los suelos y reducción de los rendimientos en los sistemas productivos agropecuarios.

Por otra parte, miremos que debemos hacer contra la desertificación, entre otras:

  • Protección, conservación y recuperación de las coberturas vegetales.
  • Prácticas agrícolas ecológicamente sostenibles.
  • Manejo adecuado de recurso hídrico.
  • Vinculación de las instituciones educativas, a través de los PRAE (Proyectos ambientales escolares) y, 
  • Participación de todos los actores sociales.

 

Columnista
4 septiembre, 2013

¿Qué pasa con los suelos del Cesar?

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Hernán Maestre Martínez

Valledupar, Ciudad Ecológica de Colombia. Recuperemos y Conservemos las cuencas de los ríos Guatapuri y Cesar. Hagamos causa común para que el Embalse Los Besotes sea una realidad, es agua para vida en Valledupar, La Paz y San Diego.


Por Hernán Maestre Martínez

Valledupar, Ciudad Ecológica de Colombia. Recuperemos y Conservemos las cuencas de los ríos Guatapuri y Cesar. Hagamos causa común para que el Embalse Los Besotes sea una realidad, es agua para  vida en Valledupar, La Paz y San Diego.

La razón de ser de esta columna pedagógica y sensibilizadora sobre el medio ambiente, nos lleva en primera instancia al abordar este problema a definir las palabras Desertificación  y Desertización, no sin antes expresar que la difícil y preocupante situación en que se encuentran los suelos del Cesar nos llevan a recabar sobre el tema.

Por desertificación se entiende la degradación de las tierras, principalmente las secas (áridas, semiáridas y subhumedas), como resultado de la acción de factores antrópicos o humanos y la desertificación que se ocasiona por procesos naturales o biofísicos como por ejemplo, intensidad, frecuencia y duración de lluvias, presencia de fuertes vientos y altas pendientes.

Después de las anteriores definiciones, digamos que los ecosistemas secos se caracterizan por bajas precipitaciones o pocas lluvias, abundante oferta de energía solar y abastecimientos limitados de agua durante gran parte del año. 

Según el Plan de Acción Regional (PAR) para la Lucha Contra la Desertificación y el Manejo de Ecosistemas Secos en el Departamento del Cesar elaborado por Corpocesar y el IDEAM en el 2007; el Cesar posee 950.716 hectáreas de ecosistemas secos (42%) del departamento, de las cuales 613.795 hectáreas se encuentran en diferentes niveles de desertificación, siendo critica su presencia en los municipios de El Paso, Astrea, Valledupar, Bosconia, La Paz, Becerril, Agustín Codazzi, El Copey, Chiriguaná y González.

Las causas  más importantes en la desertificación son:

  • La falta de conocimiento y educación sobre los usos y manejos sostenibles de los ecosistemas.
  • La transformación y deterioro de las coberturas vegetales como producto de la deforestación, quemas incontroladas.
  • El uso de tecnologías no aptas.
  • Sistemas productivos y de explotación de los recursos no acordes con las características de los suelos.

Las principales consecuencias de la desertificación son:

  • Pérdida de la cobertura vegetal, la biodiversidad y degradación del agua.
  • Degradación de los suelos y reducción de los rendimientos en los sistemas productivos agropecuarios.

Por otra parte, miremos que debemos hacer contra la desertificación, entre otras:

  • Protección, conservación y recuperación de las coberturas vegetales.
  • Prácticas agrícolas ecológicamente sostenibles.
  • Manejo adecuado de recurso hídrico.
  • Vinculación de las instituciones educativas, a través de los PRAE (Proyectos ambientales escolares) y, 
  • Participación de todos los actores sociales.