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Columnista - 29 marzo, 2017

Ni Mandrake acaba con el microtráfico

En el editorial del diario El Pilón del domingo 26, se manejó el tema del microtráfico. Para mí si se ha venido combatiendo. Lo que pasa, uno tiene que ser realista, es que por más que se combata, no habrá autoridad que pueda acabar con el consumo de drogas alucinógenas. Lo que se puede es […]

En el editorial del diario El Pilón del domingo 26, se manejó el tema del microtráfico. Para mí si se ha venido combatiendo. Lo que pasa, uno tiene que ser realista, es que por más que se combata, no habrá autoridad que pueda acabar con el consumo de drogas alucinógenas. Lo que se puede es controlar, pero este negocio tan bueno no lo acaba ni Mandrake.

No se puede decir que la policía no está actuando con mano dura porque las estadísticas nos demuestran lo contrario: 408 capturas por tráfico de estupefacientes, incautación de 500 kilos de droga, 65.078 gramos base coca, 25.959 de bazuco, 81.641 de heroína y 327.063 de marihuana en todo el departamento del Cesar.

Todos sabemos dónde quedan los expendios de drogas y sólo falta un letrero de neón que promocione su mercancía macabra, pero no ha sido posible desmantelarla por muchas razones. Hay expendedores, inclusive en la misma Plaza Alfonso López y están a cargo de jóvenes que cuidan los carros.

Inclusive para saber dónde queda una olla podrida de bazuco no es necesario montar un operativo sofisticado de inteligencia. Tan sólo ubicar un bazuquero; todas las noches vemos pasar al lado nuestro (tertulia del Turco Pavajeau) más de 40 consumidores (Plaza Alfonso López). Se reconocen fácil, mal trajeados, la cara chupada, ojos hundidos, hablan solos, caminan rápido, como con rabia, y son agresivos cuando piden una monedita. Seguirlo, pues, durante un par de horas a lo sumo, tiempo suficiente para que el consumidor haya recogido lo necesario para comprar la dosis. Al cabo de ese tiempo con seguridad lo llevará hasta la olla más cercana.

El famoso microtráfico sigue siendo una realidad alarmante en todo el país. A los consumidores, por lo general, los vienen matando, cada vez que hacen una “limpieza social”, hace rato no lo hacen, pero las ollas aun así continúan, quizás porque en estas ollas se mueve mucha plata, y los consumidores ni siquiera existen como ciudadanos y se reproducen en la misma medida de la pobreza (tema manejado por el Dane) y la falta de oportunidades.

No tengo los datos de la plata que mueve el microtráfico, pero deben ser billones y por eso, quizás, es tan difícil desmontar ese tráfico macabro y triste.

Con mucha tristeza voy a comentarles algo. Siempre he defendido a la policía, puede ser un mito urbano, pero en las calles he escuchado que algunos policías les cobran vacunas a las “ollas” para permitirles trabajar. No sé si eso sea verdad.

Lo que sí puedo decirles es que nuestra policía ha evolucionado mucho, que hoy en día es una policía respetuosa de la sociedad civil, más profesional a la hora de mantener el orden de nuestra ciudad. Eso lo sé y lo agradezco como ciudadano. Pero también sé que las “ollas” de bazuco no son difíciles de encontrar, y que son una verdad de a puño. Por lo menos, y es lo que pido, es que si se controla el comercio de bazuco, se estará controlando el principal foco de violencia en las ciudades del país y en especial de nuestra amada Valledupar, porque ese dinero ilegal continúa en la cadena de la ilegalidad. Con ese dinero se compran armas, se organizan atracos, se soborna “óigase bien, a los funcionarios”. Con ese dinero se mantiene el hampa de todos los estratos. A las autoridades les dejo estas inquietudes.

POSTDATA: Sigue recibiendo aplausos nuestro gobernador Franco Ovalle, lucido y destacado el informe de gestión de gobierno departamental. Ha sacado la cara por Valledupar. Inició la construcción de las nuevas avenidas para la ciudad en convenio con el Siva: Avenida a Fundación desde el Obelisco hasta la Gobernación, acceso desde la Avenida Los Militares hasta el barrio 450 Años, se pavimentaron 418 metros de la entrada a la Urbanización Don Alberto, Lorenzo Morales, Nando Marín, Avenida Adalberto Ovalle, redes de acueducto y alcantarillado. Otros proyectos anunciados: Mercado Público de Valledupar, Centro Comercial La Granja, La Casa en el Aire, Plaza Principal de Patillal, Plaza Alfonso López, nuevos parques para la ciudad, los puentes deprimidos (María Mulata, Los Gallos, Glorieta La Ceiba).

Gracias Gobernador Ovalle. Valledupar sin su presencia y ejecutoria sería un desastre.

Por Alberto Herazo Palmera

Columnista
29 marzo, 2017

Ni Mandrake acaba con el microtráfico

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Alberto Herazo P.

En el editorial del diario El Pilón del domingo 26, se manejó el tema del microtráfico. Para mí si se ha venido combatiendo. Lo que pasa, uno tiene que ser realista, es que por más que se combata, no habrá autoridad que pueda acabar con el consumo de drogas alucinógenas. Lo que se puede es […]


En el editorial del diario El Pilón del domingo 26, se manejó el tema del microtráfico. Para mí si se ha venido combatiendo. Lo que pasa, uno tiene que ser realista, es que por más que se combata, no habrá autoridad que pueda acabar con el consumo de drogas alucinógenas. Lo que se puede es controlar, pero este negocio tan bueno no lo acaba ni Mandrake.

No se puede decir que la policía no está actuando con mano dura porque las estadísticas nos demuestran lo contrario: 408 capturas por tráfico de estupefacientes, incautación de 500 kilos de droga, 65.078 gramos base coca, 25.959 de bazuco, 81.641 de heroína y 327.063 de marihuana en todo el departamento del Cesar.

Todos sabemos dónde quedan los expendios de drogas y sólo falta un letrero de neón que promocione su mercancía macabra, pero no ha sido posible desmantelarla por muchas razones. Hay expendedores, inclusive en la misma Plaza Alfonso López y están a cargo de jóvenes que cuidan los carros.

Inclusive para saber dónde queda una olla podrida de bazuco no es necesario montar un operativo sofisticado de inteligencia. Tan sólo ubicar un bazuquero; todas las noches vemos pasar al lado nuestro (tertulia del Turco Pavajeau) más de 40 consumidores (Plaza Alfonso López). Se reconocen fácil, mal trajeados, la cara chupada, ojos hundidos, hablan solos, caminan rápido, como con rabia, y son agresivos cuando piden una monedita. Seguirlo, pues, durante un par de horas a lo sumo, tiempo suficiente para que el consumidor haya recogido lo necesario para comprar la dosis. Al cabo de ese tiempo con seguridad lo llevará hasta la olla más cercana.

El famoso microtráfico sigue siendo una realidad alarmante en todo el país. A los consumidores, por lo general, los vienen matando, cada vez que hacen una “limpieza social”, hace rato no lo hacen, pero las ollas aun así continúan, quizás porque en estas ollas se mueve mucha plata, y los consumidores ni siquiera existen como ciudadanos y se reproducen en la misma medida de la pobreza (tema manejado por el Dane) y la falta de oportunidades.

No tengo los datos de la plata que mueve el microtráfico, pero deben ser billones y por eso, quizás, es tan difícil desmontar ese tráfico macabro y triste.

Con mucha tristeza voy a comentarles algo. Siempre he defendido a la policía, puede ser un mito urbano, pero en las calles he escuchado que algunos policías les cobran vacunas a las “ollas” para permitirles trabajar. No sé si eso sea verdad.

Lo que sí puedo decirles es que nuestra policía ha evolucionado mucho, que hoy en día es una policía respetuosa de la sociedad civil, más profesional a la hora de mantener el orden de nuestra ciudad. Eso lo sé y lo agradezco como ciudadano. Pero también sé que las “ollas” de bazuco no son difíciles de encontrar, y que son una verdad de a puño. Por lo menos, y es lo que pido, es que si se controla el comercio de bazuco, se estará controlando el principal foco de violencia en las ciudades del país y en especial de nuestra amada Valledupar, porque ese dinero ilegal continúa en la cadena de la ilegalidad. Con ese dinero se compran armas, se organizan atracos, se soborna “óigase bien, a los funcionarios”. Con ese dinero se mantiene el hampa de todos los estratos. A las autoridades les dejo estas inquietudes.

POSTDATA: Sigue recibiendo aplausos nuestro gobernador Franco Ovalle, lucido y destacado el informe de gestión de gobierno departamental. Ha sacado la cara por Valledupar. Inició la construcción de las nuevas avenidas para la ciudad en convenio con el Siva: Avenida a Fundación desde el Obelisco hasta la Gobernación, acceso desde la Avenida Los Militares hasta el barrio 450 Años, se pavimentaron 418 metros de la entrada a la Urbanización Don Alberto, Lorenzo Morales, Nando Marín, Avenida Adalberto Ovalle, redes de acueducto y alcantarillado. Otros proyectos anunciados: Mercado Público de Valledupar, Centro Comercial La Granja, La Casa en el Aire, Plaza Principal de Patillal, Plaza Alfonso López, nuevos parques para la ciudad, los puentes deprimidos (María Mulata, Los Gallos, Glorieta La Ceiba).

Gracias Gobernador Ovalle. Valledupar sin su presencia y ejecutoria sería un desastre.

Por Alberto Herazo Palmera