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Judicial - 16 febrero, 2017

Lo capturaron con una granada y al día siguiente quedó libre

Un joven se salvó de purgar una condena privativa de la libertad de aproximadamente 11, luego que la Fiscal solicitó al Juez que lo dejara en libertad porque no era un peligro para la sociedad.

Miguel José Paternina García, saliendo de una sala de audiencias del Palacio de Justicia de Valledupar. Foto AMP.
Miguel José Paternina García, saliendo de una sala de audiencias del Palacio de Justicia de Valledupar. Foto AMP.

Un joven se salvó de purgar una condena privativa de la libertad de aproximadamente 11, luego que la Fiscal solicitó al Juez que lo dejara en libertad porque no era un peligro para la sociedad, no tenía antecedentes penales, ni era reincidente en haber sido detenido por las autoridades con elementos similares de alto poder destructivo.

A Miguel José Paternina García la Policía lo capturó el pasado martes en inmediaciones de Mercabastos, en el suroccidente de Valledupar, cuando al ser requisado por una patrulla de la Policía fue sorprendido portando una granada de fragmentación IM-20, de uso privativo de las fuerzas militares, la cual llevaba en una mochila.

Sin embargo, ayer al ser presentado ante un el Juzgado Segundo Penal Municipal, luego de las audiencias de legalización, imputación de cargos y medida de aseguramiento, fue dejado en libertad pese haber sido detenido en flagrancia con el artefacto explosivo.

Según explicó la fiscal del caso, ella pidió la libertad del imputado actuando en derecho teniendo en cuenta el parágrafo del artículo segundo de la ley 1760 del 15 de julio del 2015, que expresa en que no importa el monto de la conducta, sino que deberán cumplir los requisitos exigidos por las normas de la Constitución y que para efectos de la medida de aseguramiento, en este caso no se cumplen.

El juez acogió la solicitud de la fiscal y de inmediato el detenido salió sin esposas de la sala de audiencias. La decisión de no dictar medida de aseguramiento sorprendió a los asistentes de la vista pública, por el peligro que representa portar un artefacto de alto poder destructivo.

Por Abdel Martínez Pérez

 

Judicial
16 febrero, 2017

Lo capturaron con una granada y al día siguiente quedó libre

Un joven se salvó de purgar una condena privativa de la libertad de aproximadamente 11, luego que la Fiscal solicitó al Juez que lo dejara en libertad porque no era un peligro para la sociedad.


Miguel José Paternina García, saliendo de una sala de audiencias del Palacio de Justicia de Valledupar. Foto AMP.
Miguel José Paternina García, saliendo de una sala de audiencias del Palacio de Justicia de Valledupar. Foto AMP.

Un joven se salvó de purgar una condena privativa de la libertad de aproximadamente 11, luego que la Fiscal solicitó al Juez que lo dejara en libertad porque no era un peligro para la sociedad, no tenía antecedentes penales, ni era reincidente en haber sido detenido por las autoridades con elementos similares de alto poder destructivo.

A Miguel José Paternina García la Policía lo capturó el pasado martes en inmediaciones de Mercabastos, en el suroccidente de Valledupar, cuando al ser requisado por una patrulla de la Policía fue sorprendido portando una granada de fragmentación IM-20, de uso privativo de las fuerzas militares, la cual llevaba en una mochila.

Sin embargo, ayer al ser presentado ante un el Juzgado Segundo Penal Municipal, luego de las audiencias de legalización, imputación de cargos y medida de aseguramiento, fue dejado en libertad pese haber sido detenido en flagrancia con el artefacto explosivo.

Según explicó la fiscal del caso, ella pidió la libertad del imputado actuando en derecho teniendo en cuenta el parágrafo del artículo segundo de la ley 1760 del 15 de julio del 2015, que expresa en que no importa el monto de la conducta, sino que deberán cumplir los requisitos exigidos por las normas de la Constitución y que para efectos de la medida de aseguramiento, en este caso no se cumplen.

El juez acogió la solicitud de la fiscal y de inmediato el detenido salió sin esposas de la sala de audiencias. La decisión de no dictar medida de aseguramiento sorprendió a los asistentes de la vista pública, por el peligro que representa portar un artefacto de alto poder destructivo.

Por Abdel Martínez Pérez