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Don Pilo - 22 octubre, 2016

Las basuras, un problema que huele feo

En Aguas Blancas reinan los ambientes llenos de basuras porque no hay un sistema de recolección.

Ante la falta de basureros y el servicio de recolección, las personas se ven obligadas a eliminar sus desechos en campos abiertos y otros lugares, como la orilla del río.
Ante la falta de basureros y el servicio de recolección, las personas se ven obligadas a eliminar sus desechos en campos abiertos y otros lugares, como la orilla del río.

Los malos olores y los espacios contaminados son malestares que cada día deben soportar los moradores de Aguas Blancas, debido a que en el pueblo no existen puntos de deposición de residuos y tampoco un sistema recolección de basuras por parte de ninguna empresa prestadora de este servicio.

Ante este problema, la población se ve en la necesidad de botar sus basuras en los ambientes enmontados o alejados del corregimiento, o en el peor de los casos pagarle a un recolector informal para que sea él quien elimine los residuos o utilizar los predios de sus viviendas para quemar sus desechos. En todos los casos preocupa la alarmante contaminación ambiental al que es sometido este lugar.

“Aquí las basuras cada quien le toca recogerlas en sus casas, mandarlas a botar con su propio dinero o en su defecto, quemarlos en los patios. Está prohibido pero la mayoría lo hace o lo manda a botar a las orillas del río Aguas Blancas porque en sí no existe un basurero en el pueblo. El municipio no tiene a quien mandar a recoger las basuras, nos tienen abandonados y de hecho en algunos sectores hay botaderos a cielo abierto, y en los alrededores del pueblo hay basuras en grandes cantidades”, dijo Mairo Toloza, habitante del sector.

Este panorama ha sido el mismo desde hace muchos años y a pesar de que han hablado del tema con la Alcaldía, solo una vez por año reciben la visita de un carro recolector de basuras para llevarse los desechos del pueblo, aseguran la comunidad.

Sobre el tema, el corregidor José Manuel Ospino Parra indicó que “en un pueblo que tiene más de mil viviendas y cuatro mil habitantes, donde se produce mucha basura, si no se recoge, la gente la va a botar en cualquier parte y para mí como autoridad es complicado controlarlo porque si un día se elimina un foco, al día siguiente se encuentran tres más. La gente tiene que buscar donde botar su basura pero eso no justifica que la echen donde sea”

Sin embargo, el funcionario se refirió a que durante un debate realizado en el Concejo se acordaron varios compromisos con Corpocesar, Interaseo y representantes de la Alcaldía para encontrar soluciones al problema y también establecieron que es necesario que haya una responsabilidad compartida entre los entes y la comunidad.

Por Daniela Marbello Gómez / EL PILÓN
[email protected]

 

Don Pilo
22 octubre, 2016

Las basuras, un problema que huele feo

En Aguas Blancas reinan los ambientes llenos de basuras porque no hay un sistema de recolección.


Ante la falta de basureros y el servicio de recolección, las personas se ven obligadas a eliminar sus desechos en campos abiertos y otros lugares, como la orilla del río.
Ante la falta de basureros y el servicio de recolección, las personas se ven obligadas a eliminar sus desechos en campos abiertos y otros lugares, como la orilla del río.

Los malos olores y los espacios contaminados son malestares que cada día deben soportar los moradores de Aguas Blancas, debido a que en el pueblo no existen puntos de deposición de residuos y tampoco un sistema recolección de basuras por parte de ninguna empresa prestadora de este servicio.

Ante este problema, la población se ve en la necesidad de botar sus basuras en los ambientes enmontados o alejados del corregimiento, o en el peor de los casos pagarle a un recolector informal para que sea él quien elimine los residuos o utilizar los predios de sus viviendas para quemar sus desechos. En todos los casos preocupa la alarmante contaminación ambiental al que es sometido este lugar.

“Aquí las basuras cada quien le toca recogerlas en sus casas, mandarlas a botar con su propio dinero o en su defecto, quemarlos en los patios. Está prohibido pero la mayoría lo hace o lo manda a botar a las orillas del río Aguas Blancas porque en sí no existe un basurero en el pueblo. El municipio no tiene a quien mandar a recoger las basuras, nos tienen abandonados y de hecho en algunos sectores hay botaderos a cielo abierto, y en los alrededores del pueblo hay basuras en grandes cantidades”, dijo Mairo Toloza, habitante del sector.

Este panorama ha sido el mismo desde hace muchos años y a pesar de que han hablado del tema con la Alcaldía, solo una vez por año reciben la visita de un carro recolector de basuras para llevarse los desechos del pueblo, aseguran la comunidad.

Sobre el tema, el corregidor José Manuel Ospino Parra indicó que “en un pueblo que tiene más de mil viviendas y cuatro mil habitantes, donde se produce mucha basura, si no se recoge, la gente la va a botar en cualquier parte y para mí como autoridad es complicado controlarlo porque si un día se elimina un foco, al día siguiente se encuentran tres más. La gente tiene que buscar donde botar su basura pero eso no justifica que la echen donde sea”

Sin embargo, el funcionario se refirió a que durante un debate realizado en el Concejo se acordaron varios compromisos con Corpocesar, Interaseo y representantes de la Alcaldía para encontrar soluciones al problema y también establecieron que es necesario que haya una responsabilidad compartida entre los entes y la comunidad.

Por Daniela Marbello Gómez / EL PILÓN
[email protected]