Luego de que el crecimiento económico le trajera validez a la globalización, se volvió frecuente encontrar a través de los años avances tecnológicos que condicionaron la vida cotidiana del hombre. Ya sea en el trabajo, las relaciones sociales y la comunicación.

En este caso es frecuente encontrar en diferentes lugares de la cuidad y a cualquier hora del día a personas con un celular a la mano, un computador, tablet, pantalla 3D y demás dispositivos especializados que según estudiosos afectan la salud, más específicamente la visual.

Dado que las largas jornadas laborales a las que se exponen las personas con este tipo de tecnología y las horas adicionales que están en sus casas con los celulares, mirando televisión o usando el video juego; son suficientes para desarrollar o agravar cualquier enfermedad visual.

Entre las que se encuentra la Miopía, una enfermedad ocular que se caracteriza por desarrollarse a temprana edad e imposibilitar a los seres humanos a tener una visión clara, debido a la formación excesiva de la curvatura del cristalino que imposibilita que las imágenes de los objetos no se formen un poco antes de llegar a la retina.

La miopía según la Oftalmóloga Haysel Sierra, especialista en Retina y Vítreo, es una patología que se forma comúnmente en la niñez, pero que se puede agravar en los adultos que la padecen si es mal cuidada, por eso las personas que cuenten con este tipo de tecnologías es conveniente que la usen de manera mesurada.

Sin embargo, esta no es la única molestia que los consumidores se exponen a desarrollar, también podrían adquirir cataratas, tensión ocular y errores refractivos; que según la Organización Mundial de la Salud este último es un trastorno muy común en los ojos cuando provisionalmente el ojo no puede enfocar claramente las imágenes.

Debido a que gran parte de los dispositivos tecnológicos son fuentes de luz azul, (luz altamente energética) que en abundancia en contacto con los ojos pueden producir molestias y diagnósticos; por lo tanto es conveniente que los usuarios no permanezcan tanto tiempo en frente de ella.

“La luz azul que es utilizada para abstraer los colores en las pantallas led de televisores y dispositivos móviles, son tan radiactivas que pueden afectar las células de los ojos (Conos, Bastones) y la funcionalidad visual, por lo que estas células hacen parte de la operatividad óptica y trabajan como foto receptores capaces de ayudar a transformar en el cerebro los impulsos nerviosos en imágenes”, explicó Sierra.

Si una persona está constantemente retraída, cierra los ojos para observar y le da frecuentemente dolor de cabeza es probable que este presentando alguna patología o molestia visual y debe consultar a un Oftalmólogo.

Considerando que son muchos los usuarios que pasan la mayor parte del tiempo frente a una pantalla Led los expertos aconsejan:

• Que las exposiciones a esta tecnología no sean mayores de dos horas interrumpidas.
• Las pantallas de los dispositivos móviles preferiblemente estén por debajo de los ojo y  el tamaño de letra no sea tan pequeña para que no se esfuerce tanto la vista.
• La distancia entre el ordenador tecnológico y los ojos sea prudencial, mínimo 20 cm.
• No usar toda la luminosidad o brillo de los dispositivos tecnológicos
• Pestañear frecuentemente cuando se está en frente del ordenador.

Si bien es cierto que cualquier persona puede tener molestias visuales por diferentes factores externos, aquellos que utilizan exorbitantemente sus dispositivos móviles u otro aparato tecnológico son altamente propensos a padecerlas, ya sea a corto o mediano plazo.

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