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Don Pilo - 12 noviembre, 2016

La inseguridad, un daño colateral en Villa Maruámake

Con el acompañamiento de la autoridad, los habitantes se sintieron respaldados y pidieron que su presencia sea constante.

En cuanto a la seguridad en Villa Maruámake, la totalidad de los pobladores manifestaron su inconformidad por los continuos atracos que se presentan en el sector. A Cualquier hora ‘los dueños de lo ajeno’ intimidan a los habitantes del barrio y los despojan de sus pertenencias.

“Si no tuviéramos esa cantidad de lotes enmontados, propiedad de la subestación de Transelca, los robos fueran menos o al menos no se usaran esos predios para repartir el botín, consumir drogas o idealizar los robos, porque aunque la policía hace sus rondas se sigue presentando la situación”, indicó presidente de la Junta de Acción Comunal.

Durante el recorrido por las calles de Villa Maruámake, dos patrulleros de la Policía Nacional cumplieron con su deber, acompañándonos hasta los sectores más vulnerables del barrio y así poder constatar la situación.

Así mismo, pobladores y vecinos de barrios aledaños aprovecharon la ocasión para exigir a las autoridades un mejor servicio y mayor acompañamiento.

La drogadicción es otro de los flagelos que golpea a esta comunidad, pero que gracias al apoyo de las iglesias del barrio, el presidente de Junta de Acción Comunal y otros líderes han logrado sacar de este oscuro y corto camino a muchos jóvenes, quienes ahora se muestran ante la sociedad como hombres de bien. Esto enorgullece a la comunidad y los anima a seguir trabajando unidos por sus jóvenes.

 

Don Pilo
12 noviembre, 2016

La inseguridad, un daño colateral en Villa Maruámake

Con el acompañamiento de la autoridad, los habitantes se sintieron respaldados y pidieron que su presencia sea constante.


En cuanto a la seguridad en Villa Maruámake, la totalidad de los pobladores manifestaron su inconformidad por los continuos atracos que se presentan en el sector. A Cualquier hora ‘los dueños de lo ajeno’ intimidan a los habitantes del barrio y los despojan de sus pertenencias.

“Si no tuviéramos esa cantidad de lotes enmontados, propiedad de la subestación de Transelca, los robos fueran menos o al menos no se usaran esos predios para repartir el botín, consumir drogas o idealizar los robos, porque aunque la policía hace sus rondas se sigue presentando la situación”, indicó presidente de la Junta de Acción Comunal.

Durante el recorrido por las calles de Villa Maruámake, dos patrulleros de la Policía Nacional cumplieron con su deber, acompañándonos hasta los sectores más vulnerables del barrio y así poder constatar la situación.

Así mismo, pobladores y vecinos de barrios aledaños aprovecharon la ocasión para exigir a las autoridades un mejor servicio y mayor acompañamiento.

La drogadicción es otro de los flagelos que golpea a esta comunidad, pero que gracias al apoyo de las iglesias del barrio, el presidente de Junta de Acción Comunal y otros líderes han logrado sacar de este oscuro y corto camino a muchos jóvenes, quienes ahora se muestran ante la sociedad como hombres de bien. Esto enorgullece a la comunidad y los anima a seguir trabajando unidos por sus jóvenes.