El acordeonero que se unió a la vida musical de Diomedes Díaz, en 1994, se interpretará a sí mismo, motivo por el que tuvo que bajar de peso durante varios meses para retomar su imagen juvenil.

Iván recibió la llamada del ‘Cacique de La Junta’ a sus 17 años, luego del fallecimiento de Juancho Rois. Desde ese momento comenzó su ascenso junto al artista más vendedor del momento.

Iván Zuleta Barros se coronó como Rey Infantil del Festival Vallenato en 1987 y 1988. En la categoría de Rey Aficionado en 1994 y fue Rey de Reyes en Piquería en 1997.
El acordeonero y verseador no ha superado la muerte de Diomedes Díaz, “todavía no lo he superado. Todos los amantes de la música vallenata estamos marcados por la música de Diomedes. Unos se enamoraron y otros dedicaron canciones. Yo estoy tan consternado como lo está el país. Apenas lo estamos asimilando. Fue un golpe muy fuerte. Uno entiende que uno nace para morirse, pero morir de la edad de mi compadre, es decir que murió joven. Eso fue lo inesperado” afirmó.

“La entrega total al arte. El acordeón sobre la mesa podría estar en el piso, pero nosotros le tenemos mucho respeto y no lo colocamos en el suelo porque nosotros vivimos de ese instrumento. El sustento de los hijos, el reconocimiento que tenemos, el cariño de la gente, el afecto y la admiración de la debemos al acordeón. Diomedes fue muy enamorado de su canto y yo soy muy enamorado de mi acordeón”, dijo Iván Zuleta sobre lo aprendido con Diomedes en los años que estuvo acompañándolo en su vida musical. 

Junto a Diomedes Díaz grabó:
1995 ‘Un Canto Celestial’.

1996 ‘Muchas gracias’.

1997 ‘Mi biografía’. Con esta producción obtuvieron séxtuple Disco de Platino.

1998 ‘Volver a vivir’.

2007 ‘La Voz’

Por Sara Maestre