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Columnista - 27 marzo, 2015

Valledupar y Riohacha no están en competencia

Acá en Bogotá me relaciono a diario con gente del Cesar y La Guajira, es más, creo que entre mis amigos cercanos tengo un cincuenta-cincuenta y por eso he podido observar como se ha venido creando una cierta rivalidad entre el Festival de la Leyenda Vallenata de Valledupar y el Festival Francisco el Hombre de […]

Acá en Bogotá me relaciono a diario con gente del Cesar y La Guajira, es más, creo que entre mis amigos cercanos tengo un cincuenta-cincuenta y por eso he podido observar como se ha venido creando una cierta rivalidad entre el Festival de la Leyenda Vallenata de Valledupar y el Festival Francisco el Hombre de Riohacha, lo cual a mi juicio no es malo per sé, sin embargo si vale la pena hacer un breve análisis de lo que está ocurriendo.

Ahora que acaba de pasar la edición VII del Francisco el Hombre, el comentario generalizado de los guajiros fue que el Festival de Riohacha tenía más y mejor publicidad que el de Valledupar, que el lanzamiento del Festival guajiro fue más pomposo y nutrido que el vallenato; en fin, siempre comparando el uno con el otro, como si esto fuera pista de competencia, lo cual expresó Diomedes en su merengue ‘La Rasquiñita’:
Yo no sé si sea el primero  
Pero el segundo no soy 
Solo sé que mi folclor no es pista de competencia 
Es un acto de nobleza de un pueblo trabajador  
Que al compás de un acordeón dice y canta lo siente
Dedicarse a impulsar los nuevos valores del vallenato contemporáneo es una tarea loable y plausible del Festival Francisco el Hombre, que hasta ahora es la única vitrina y plataforma de lanzamiento que tienen las nuevas figuras del vallenato moderno, por eso no hay razón para descalificarlo por parte de los vallenatos, pero tampoco los guajiros tienen razón para atacar al Festival Vallenato diciendo que se quedó rezagado, que se durmió en los laureles, que no es ni chicha ni limoná, etc.

No se pueden comparar manzanas con mangos, son dos eventos totalmente distintos, aunque ambos busquen el bienestar para el folclor vallenato, el de Valledupar la preservación de las raíces y la defensa de lo autóctono y el de Riohacha el impulso de los artistas nuevos del vallenato contemporáneo; ¿acaso uno compara un niño de siete años con su papá de cuarenta y ocho? Lo único que se podría decir es que se parece o no, pero nunca que el uno es más inteligente que el otro o que el uno va a llegar más lejos que el otro; a mi juicio estos dos eventos son simplemente complementarios.

COLOFÓN: A propósito del Festival Francisco el Hombre, llamo la atención para que sus organizadores hagan correctivos a fin de evitar lo que ocurrió en una competencia que supuestamente era de regiones: ganaron guajiros representando a Sucre.

Columnista
27 marzo, 2015

Valledupar y Riohacha no están en competencia

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Jorge Nain

Acá en Bogotá me relaciono a diario con gente del Cesar y La Guajira, es más, creo que entre mis amigos cercanos tengo un cincuenta-cincuenta y por eso he podido observar como se ha venido creando una cierta rivalidad entre el Festival de la Leyenda Vallenata de Valledupar y el Festival Francisco el Hombre de […]


Acá en Bogotá me relaciono a diario con gente del Cesar y La Guajira, es más, creo que entre mis amigos cercanos tengo un cincuenta-cincuenta y por eso he podido observar como se ha venido creando una cierta rivalidad entre el Festival de la Leyenda Vallenata de Valledupar y el Festival Francisco el Hombre de Riohacha, lo cual a mi juicio no es malo per sé, sin embargo si vale la pena hacer un breve análisis de lo que está ocurriendo.

Ahora que acaba de pasar la edición VII del Francisco el Hombre, el comentario generalizado de los guajiros fue que el Festival de Riohacha tenía más y mejor publicidad que el de Valledupar, que el lanzamiento del Festival guajiro fue más pomposo y nutrido que el vallenato; en fin, siempre comparando el uno con el otro, como si esto fuera pista de competencia, lo cual expresó Diomedes en su merengue ‘La Rasquiñita’:
Yo no sé si sea el primero  
Pero el segundo no soy 
Solo sé que mi folclor no es pista de competencia 
Es un acto de nobleza de un pueblo trabajador  
Que al compás de un acordeón dice y canta lo siente
Dedicarse a impulsar los nuevos valores del vallenato contemporáneo es una tarea loable y plausible del Festival Francisco el Hombre, que hasta ahora es la única vitrina y plataforma de lanzamiento que tienen las nuevas figuras del vallenato moderno, por eso no hay razón para descalificarlo por parte de los vallenatos, pero tampoco los guajiros tienen razón para atacar al Festival Vallenato diciendo que se quedó rezagado, que se durmió en los laureles, que no es ni chicha ni limoná, etc.

No se pueden comparar manzanas con mangos, son dos eventos totalmente distintos, aunque ambos busquen el bienestar para el folclor vallenato, el de Valledupar la preservación de las raíces y la defensa de lo autóctono y el de Riohacha el impulso de los artistas nuevos del vallenato contemporáneo; ¿acaso uno compara un niño de siete años con su papá de cuarenta y ocho? Lo único que se podría decir es que se parece o no, pero nunca que el uno es más inteligente que el otro o que el uno va a llegar más lejos que el otro; a mi juicio estos dos eventos son simplemente complementarios.

COLOFÓN: A propósito del Festival Francisco el Hombre, llamo la atención para que sus organizadores hagan correctivos a fin de evitar lo que ocurrió en una competencia que supuestamente era de regiones: ganaron guajiros representando a Sucre.