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Columnista - 24 diciembre, 2014

Sueños de Tío Chiro: antidemocracia en el Cesar

El domingo anterior mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan me invitaron a desayunar y a charlar en la terraza del Hotel Sicarare y fuimos muy bien atendidos por el pariente Álvaro ‘Pepe’ Movilla Zuleta. Tío Chiro contó que el sábado había tenido un sueño importante, pero le parecía pecaminoso para la gente del […]

El domingo anterior mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan me invitaron a desayunar y a charlar en la terraza del Hotel Sicarare y fuimos muy bien atendidos por el pariente Álvaro ‘Pepe’ Movilla Zuleta.

Tío Chiro contó que el sábado había tenido un sueño importante, pero le parecía pecaminoso para la gente del Cesar. Dijo que soñó que en las elecciones del año entrante para Gobernación, Asamblea, alcaldías y concejos solo se habían inscrito candidatos de un solo partido político denominado “Salvos e ilesos por el Cesar”, que unía a los partidos Liberal, Conservador, Cambio Radical, Alianza Verde, Polo Democrático, etc.

Contó que en las elecciones del 2015 solo se habían inscritos candidatos de una misma familia, porque el resto de los cesarenses eran incapaces y faltos de valor civil para emprender conquistas políticas.

Nos dijo que el Partido “Salvos e ilesos por el Cesar”, como era obvio, había arrasado con sus listas las 25 alcaldías y concejos, la Gobernación y la Asamblea.

Que había sido un evento democrático transparente, sin maquinarias políticas, sin constreñimiento al elector y sin compra venta de voto. Una democracia fidedigna, soporte para un estudio en ciencia política.

Todos eran de la misma familia aglutinados en el Partido “Salvos e ilesos del Cesar”: hermanos, hijos, mamá y papá, sobrinos, tíos, primos hermanos, cuñados (as) y novias (os), esposas (os), pertenecientes a la “Casa Cielo”.
Inclusive, también soñó que toda la contratación del Departamento había quedado en manos de dicho Partido y hasta los directores y gerentes de los institutos como Sena, ICBF, Invías, Banco Agrario, Registradurías municipales y delegados del Registrador, notarios, comandantes de Policía y Ejército eran integrantes de la misma familia.

En señal de tanta confianza y transparencia el alto gobierno les había asignado su cuota en el Consejo Superior de la Universidad –CSU- de la Universidad Popular del Cesar y se alzaron con la Rectoría y también tendieron la mano para que Luis Urón Márquez saliera de la Cámara de Comercio, les entregaron el control de Telecaribe; el Hospital Rosario Pumarejo de López y la red hospitalaria pasaron a sus anchas. Y de la renovada Comfacesar habían sacado a Ernesto Orozco, para que todos quedaran “Salvos e ilesos”.

Tío Chiro sostuvo que su sueño fue tan real que hasta se parecía mucho a lo que se está viviendo ahora en el Departamento, lean y verán:
Senador: José Alfredo Gnecco Zuleta, su primo hermano Luis Alberto Monsalvo, Gobernador del Cesar; Primera Dama, Cielo Gnecco, mamá del Gobernador; ‘Popo’ Barros Gnecco, presidente de la Asamblea del Cesar; César Cerchar, secretario del Despacho del Gobernador; Muma Gnecco, asesora del Gobernador, y la prima Azalea Castro Gutiérrez, coordinadora de Cultura. Rafael Bolaño, cuñado de la Primera Dama, Secretario de Salud y… bueno, se acabó el espacio para seguir esta columna, después me dan serrucho, serrucho, como dicen que les dan a los profesionales y ciudadanos cesarenses que no tienen “chance” de trabajar en las obras que se construyen en el Cesar, todos vienen de otros departamentos. ¿Por qué será? ¿Comparten el sueño de mi consejero periodístico? Hasta la próxima semana. Feliz Navidad.
[email protected]
@tiochiro.

Columnista
24 diciembre, 2014

Sueños de Tío Chiro: antidemocracia en el Cesar

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Aquilino Cotes Zuleta

El domingo anterior mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan me invitaron a desayunar y a charlar en la terraza del Hotel Sicarare y fuimos muy bien atendidos por el pariente Álvaro ‘Pepe’ Movilla Zuleta. Tío Chiro contó que el sábado había tenido un sueño importante, pero le parecía pecaminoso para la gente del […]


El domingo anterior mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan me invitaron a desayunar y a charlar en la terraza del Hotel Sicarare y fuimos muy bien atendidos por el pariente Álvaro ‘Pepe’ Movilla Zuleta.

Tío Chiro contó que el sábado había tenido un sueño importante, pero le parecía pecaminoso para la gente del Cesar. Dijo que soñó que en las elecciones del año entrante para Gobernación, Asamblea, alcaldías y concejos solo se habían inscrito candidatos de un solo partido político denominado “Salvos e ilesos por el Cesar”, que unía a los partidos Liberal, Conservador, Cambio Radical, Alianza Verde, Polo Democrático, etc.

Contó que en las elecciones del 2015 solo se habían inscritos candidatos de una misma familia, porque el resto de los cesarenses eran incapaces y faltos de valor civil para emprender conquistas políticas.

Nos dijo que el Partido “Salvos e ilesos por el Cesar”, como era obvio, había arrasado con sus listas las 25 alcaldías y concejos, la Gobernación y la Asamblea.

Que había sido un evento democrático transparente, sin maquinarias políticas, sin constreñimiento al elector y sin compra venta de voto. Una democracia fidedigna, soporte para un estudio en ciencia política.

Todos eran de la misma familia aglutinados en el Partido “Salvos e ilesos del Cesar”: hermanos, hijos, mamá y papá, sobrinos, tíos, primos hermanos, cuñados (as) y novias (os), esposas (os), pertenecientes a la “Casa Cielo”.
Inclusive, también soñó que toda la contratación del Departamento había quedado en manos de dicho Partido y hasta los directores y gerentes de los institutos como Sena, ICBF, Invías, Banco Agrario, Registradurías municipales y delegados del Registrador, notarios, comandantes de Policía y Ejército eran integrantes de la misma familia.

En señal de tanta confianza y transparencia el alto gobierno les había asignado su cuota en el Consejo Superior de la Universidad –CSU- de la Universidad Popular del Cesar y se alzaron con la Rectoría y también tendieron la mano para que Luis Urón Márquez saliera de la Cámara de Comercio, les entregaron el control de Telecaribe; el Hospital Rosario Pumarejo de López y la red hospitalaria pasaron a sus anchas. Y de la renovada Comfacesar habían sacado a Ernesto Orozco, para que todos quedaran “Salvos e ilesos”.

Tío Chiro sostuvo que su sueño fue tan real que hasta se parecía mucho a lo que se está viviendo ahora en el Departamento, lean y verán:
Senador: José Alfredo Gnecco Zuleta, su primo hermano Luis Alberto Monsalvo, Gobernador del Cesar; Primera Dama, Cielo Gnecco, mamá del Gobernador; ‘Popo’ Barros Gnecco, presidente de la Asamblea del Cesar; César Cerchar, secretario del Despacho del Gobernador; Muma Gnecco, asesora del Gobernador, y la prima Azalea Castro Gutiérrez, coordinadora de Cultura. Rafael Bolaño, cuñado de la Primera Dama, Secretario de Salud y… bueno, se acabó el espacio para seguir esta columna, después me dan serrucho, serrucho, como dicen que les dan a los profesionales y ciudadanos cesarenses que no tienen “chance” de trabajar en las obras que se construyen en el Cesar, todos vienen de otros departamentos. ¿Por qué será? ¿Comparten el sueño de mi consejero periodístico? Hasta la próxima semana. Feliz Navidad.
[email protected]
@tiochiro.