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Columnista - 19 julio, 2014

Renato Capriles

Hasta el último suspiro de su vida, Renato Capriles, fallecido la semana pasada, en Caracas, a los 82 años, director y fundador de una las orquestas más afamadas del continente, “Los Melódicos”, demostró su admiración por los ritmos Colombianos. Fue sepultado en la capital Venezolana, a ritmo del Merecumbé, creado por “Pacho” Galán, a quien […]

Hasta el último suspiro de su vida, Renato Capriles, fallecido la semana pasada, en Caracas, a los 82 años, director y fundador de una las orquestas más afamadas del continente, “Los Melódicos”, demostró su admiración por los ritmos Colombianos. Fue sepultado en la capital Venezolana, a ritmo del Merecumbé, creado por “Pacho” Galán, a quien manifestó, el maestro Renato, gran respeto, además, por otros aires de la costa, de los cuales tanto nutrió a su extenso repertorio,de 100 álbumes musicales, que se conocieron en Venezuela y solo 50, en Colombia .

Capriles, era miembro de una de las familias más poderosas económicamente del país bolivariano, con tentáculos comerciales en todo el continente, su inclinación por la música, desde muy joven, le valió la desaprobación de sus 15 hermanos, que no compartían este parecer, y lo desheredaron.

En 1958, grabó su primer álbum, con arreglos musicales realizados por otro destacado músico, el dominicano, radicado en Venezuela, por persecución política, Luis María Frometa, con él fundó la Orquesta “Los Melódicos”, que se conocería en América, como “la Orquesta que impone el Ritmo Venezuela”.

Fue un extraordinario relacionista público de su orquesta, desde el periódico “El Mundo”, propiedad de su familia, emprendió una agresiva campaña para que Billos Frometa, volviera a los escenarios, en esa época, existió un veto musical por supuesta bigamia, para quien fuera su archirrival musical; sus colegas le criticaban esta actitud, pero él se defendía, argumentando que el quería competir con Billos.

De ese amor por el folclor Colombiano, impuso su estilo musical incluyéndolo en su vasto repertorio y también la música vallenata, hizo grandes versiones de canciones nuestras, La Negra, Alberto Murgas; La Parranda es pa’ Amanece, Daniel Celedón; El Cantor de Fonseca, Carlos Huertas; Todo es para Ti, Calixto Ochoa; ente otras.

En 1981, hizo un Experimento musical, con el sonido original de su orquesta, a la cual le implementó los instrumentos básicos del folclor vallenato, para ser un intérprete fiel de nuestros aires, el acordeón lo interpretó Lucho Beltrán, y la caja vallenata, José Márquez, músicos sabaneros residentes en Caracas.

Ese año se conoció el álbum, “Los Melódicos En Vallenatos”, allí Renato, le hace un gran reconocimiento a la obra musical de Escalona, de 10 canciones que grabó, 6 pertenecen a este autor, María Tere, El Ermitaño, El testamento, La Patillalera, La Custodia de Badillo y el Almirante Padilla, y las otras, Gustavo Gutiérrez, La Espina; La Colegiala, Julio de la Ossa; Matilde Lina, de Leandro Díaz.

En el mismo disco tuvo la oportunidad de denunciar ante el mundo a través de la canción, Yo Tenía Mi Cafetal, del compositor, Álvaro Serrano, la grave situación de descomposición social por la que atravesó nuestra región, Cesar y Guajira, al suplantar nuestros campesinos sus cultivos de pan coger, por siembra de Marihuana, con las nefastas consecuencias que nos dejó esta codicia.

Capriles, creó otras orquestas para deleite de sus seguidores, La Inmensa, La Grande, La tremenda y los solistas, con las cuales obtuvo resonantes triunfos.

Columnista
19 julio, 2014

Renato Capriles

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Celso Guerra Gutiérrez

Hasta el último suspiro de su vida, Renato Capriles, fallecido la semana pasada, en Caracas, a los 82 años, director y fundador de una las orquestas más afamadas del continente, “Los Melódicos”, demostró su admiración por los ritmos Colombianos. Fue sepultado en la capital Venezolana, a ritmo del Merecumbé, creado por “Pacho” Galán, a quien […]


Hasta el último suspiro de su vida, Renato Capriles, fallecido la semana pasada, en Caracas, a los 82 años, director y fundador de una las orquestas más afamadas del continente, “Los Melódicos”, demostró su admiración por los ritmos Colombianos. Fue sepultado en la capital Venezolana, a ritmo del Merecumbé, creado por “Pacho” Galán, a quien manifestó, el maestro Renato, gran respeto, además, por otros aires de la costa, de los cuales tanto nutrió a su extenso repertorio,de 100 álbumes musicales, que se conocieron en Venezuela y solo 50, en Colombia .

Capriles, era miembro de una de las familias más poderosas económicamente del país bolivariano, con tentáculos comerciales en todo el continente, su inclinación por la música, desde muy joven, le valió la desaprobación de sus 15 hermanos, que no compartían este parecer, y lo desheredaron.

En 1958, grabó su primer álbum, con arreglos musicales realizados por otro destacado músico, el dominicano, radicado en Venezuela, por persecución política, Luis María Frometa, con él fundó la Orquesta “Los Melódicos”, que se conocería en América, como “la Orquesta que impone el Ritmo Venezuela”.

Fue un extraordinario relacionista público de su orquesta, desde el periódico “El Mundo”, propiedad de su familia, emprendió una agresiva campaña para que Billos Frometa, volviera a los escenarios, en esa época, existió un veto musical por supuesta bigamia, para quien fuera su archirrival musical; sus colegas le criticaban esta actitud, pero él se defendía, argumentando que el quería competir con Billos.

De ese amor por el folclor Colombiano, impuso su estilo musical incluyéndolo en su vasto repertorio y también la música vallenata, hizo grandes versiones de canciones nuestras, La Negra, Alberto Murgas; La Parranda es pa’ Amanece, Daniel Celedón; El Cantor de Fonseca, Carlos Huertas; Todo es para Ti, Calixto Ochoa; ente otras.

En 1981, hizo un Experimento musical, con el sonido original de su orquesta, a la cual le implementó los instrumentos básicos del folclor vallenato, para ser un intérprete fiel de nuestros aires, el acordeón lo interpretó Lucho Beltrán, y la caja vallenata, José Márquez, músicos sabaneros residentes en Caracas.

Ese año se conoció el álbum, “Los Melódicos En Vallenatos”, allí Renato, le hace un gran reconocimiento a la obra musical de Escalona, de 10 canciones que grabó, 6 pertenecen a este autor, María Tere, El Ermitaño, El testamento, La Patillalera, La Custodia de Badillo y el Almirante Padilla, y las otras, Gustavo Gutiérrez, La Espina; La Colegiala, Julio de la Ossa; Matilde Lina, de Leandro Díaz.

En el mismo disco tuvo la oportunidad de denunciar ante el mundo a través de la canción, Yo Tenía Mi Cafetal, del compositor, Álvaro Serrano, la grave situación de descomposición social por la que atravesó nuestra región, Cesar y Guajira, al suplantar nuestros campesinos sus cultivos de pan coger, por siembra de Marihuana, con las nefastas consecuencias que nos dejó esta codicia.

Capriles, creó otras orquestas para deleite de sus seguidores, La Inmensa, La Grande, La tremenda y los solistas, con las cuales obtuvo resonantes triunfos.