A raíz del último decreto del alcalde Fredys Socarras Reales para regular el mototaxismo en la ciudad de Valledupar, se han escuchado múltiples pronunciamientos a favor o en contra y otras posiciones intermedias. En lo único que hay consenso es en que el mototaxismo en Valledupar se convirtió en un problema para la movilidad de los conductores de carros y los peatones.

Por casualidad estuve hablando con un mototaxista y me dijo que estaba en este oficio por necesidad y la nueva medida del Alcalde lo llevaría a la delincuencia porque en Valledupar no encuentra más qué hacer. Le pregunté si la moto era de él, me respondió que el dueño es un policía retirado por jubilación, que tiene varias motos para el mototaxismo y por cada día de trabajo le pagan 15 mil pesos. Imagínense, si de los seis mil mototaxistas deambulando en Valledupar la mitad entrega esta cantidad de dinero, por la desesperación andan como locos en las calles para ganarse por lo menos 40 mil pesos diarios, de los cuales les toca comprar la gasolina; es decir, apenas alcanzan a ganar el salario mínimo si trabajan todos los días.

No sé si es cierto el comentario callejero de que algunos expolicías son propietarios de varias motos utilizadas en el servicio de mototaxismo, pero la verdad de esto es que es vox populi, ante lo cual he pensado: ¿será que a las autoridades no les compete investigar la veracidad de estos rumores?
Ya que los alcaldes son los jefes de las policías locales; por ende, respetuosamente, le solicito al alcalde Fredys Socarras Reales responda esta incógnita que sin duda alguna se la hacen cientos de personas, por la constante participación de policías activos y retirados en los diferentes delitos que a menudo se cometen en el país.

Al alcalde Fredys Socarras Reales hay que reconocerle su interés en acabar o regular el mototaxismo; sin embargo, todas las anteriores medidas han sido inoperantes, esta última de que las motos sólo las manejen sus propietarios es la de mejor resultado, en vista que en las calles se nota la disminución de estos vehículos.

Mi concepto, aunque no sé si sea legal, es que el DANE debería censar a los propietarios de motos y si los miembros de sus hogares en condiciones de manejarlas son menos de las motos que tienen, oblíguelos a vendérselas a quienes las están manejando como mototaxi, en cómodas cuotas. Esto, mientras se aumenta la cobertura y se mejora la calidad del trasporte público urbano en busetas, para incentivar a la gente a utilizarlo, ya que las motocicletas son un medio de transporte peligroso aunque sean manejadas con cuidado.