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Columnista - 25 julio, 2014

¿Oiga y qué pasó?

Esto de escribir diario como Chelo en El Heraldo o Flash en Día a Día es jodido, la mayoría de veces pesao, ya por pereza o por carencia de temas que logren motivar al lector para que lean los artículos y nunca lo dejen por la mitad o les produzcan sueño, como pasa muchas veces, […]

Esto de escribir diario como Chelo en El Heraldo o Flash en Día a Día es jodido, la mayoría de veces pesao, ya por pereza o por carencia de temas que logren motivar al lector para que lean los artículos y nunca lo dejen por la mitad o les produzcan sueño, como pasa muchas veces, casi siempre con esas largas peroratas de índole económicas con números y porcentajes que tiene una clientela especial o aquellas que profundizan en Teología, Metafísica y Filosofía, exclusiva para clientes muy seleccionados o curas frustrados o ahora con los columnistas abogados que dictan cátedras de derecho, que aprovechan los prímiparos para enriquecer sus conocimientos, pero también gente como yo, que me los como, como si se tratara de una rica chuleta de cerdo Zenu y los comento especialmente con uno de ellos, el Doctor Hugo Mendoza, profesor universitario y distinguido abogado que también lee los míos, pues me los critica con propiedad y yo de atrevido le hago observaciones, que él con agrado recibe, porque como humanos que somos nos equivocamos y bastante, pero buena por Hugo y por el Doctor Arregocés Baute, a quienes les pido, al primero, porque el segundo ya está para pensionarse Ad-honoren (¿se escribe así?), en este nuestro emblemático Diario El Pilón que no declinen y continúen con su labor de enseñanza; sería bueno que también lo hicieran los médicos y hablaran del Dengue y el nuevo virus el Kurucunkunca (o algo parecido), los agrónomos y veterinarios que disponen los primeros de mucho tiempo y tienen temas para tratar en esta zona de vocación agropecuaria; los arquitectos e ingenieros que viven hablando siempre y criticando a puerta cerrada, porque son cobardes y cohonestan la corrupción, porque nunca denuncian el delito cometido por funcionarios que les exigen altos porcentajes para adjudicarles un contrato; como me gustaría leer a Toño Maya, que sé que escribe bien y tiene un amplio poder de síntesis hablar sobre los constructores que invaden el espacio público, ante la mirada indiferente de las autoridades, o a William Fuentes Lacouture disertar sobre la malla vial, incluyendo la carrera, creo que la 14 donde él tiene la oficina, a donde casi no se puede llegar en carro.

Son muchas las personas que sin ostentar un título profesional, como yo, la Universidad de la Vida les ha dado conocimiento y experiencias para escribir una columna de estas cada 7 días, por espacio de más de 15 años, que no es miguita, es bastante y tener la satisfacción de encontrar en la calle, en las esquinas y en todas partes a mucha gente que lo saluda con cariño y le manifiesta que lo lee y cuando por alguna circunstancia no lo hago, también preguntan: ¿Oiga y qué paso, por qué hoy se fue en blanco, o ya lo cortaron en El Pilón por escribir tanta M?.

Se acabo el espacio, pero en los renglones que me quedan, voy a felicitar al señor Gobernador, porque las cosas van bien, porque las está haciendo bien y no me equivoqué cuando en alguna oportunidad dije que a este Departamento le faltaba ser manejado por un economista técnico con conocimientos políticos.

Notica: Cuidao Señor Alcalde de La Paz se le va a ocurrir sembrar otra palmita, mire que las que sembró, todas están secas y mutiladas, no las salva nadie, solo Dios y Él está muy ocupado para atender estas pendejadas; el Chorro de Pepe lo que necesita es sombra y las palmas no las dan, solamente producen tuquecas y ratones.

Columnista
25 julio, 2014

¿Oiga y qué pasó?

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
José M. Aponte Martínez

Esto de escribir diario como Chelo en El Heraldo o Flash en Día a Día es jodido, la mayoría de veces pesao, ya por pereza o por carencia de temas que logren motivar al lector para que lean los artículos y nunca lo dejen por la mitad o les produzcan sueño, como pasa muchas veces, […]


Esto de escribir diario como Chelo en El Heraldo o Flash en Día a Día es jodido, la mayoría de veces pesao, ya por pereza o por carencia de temas que logren motivar al lector para que lean los artículos y nunca lo dejen por la mitad o les produzcan sueño, como pasa muchas veces, casi siempre con esas largas peroratas de índole económicas con números y porcentajes que tiene una clientela especial o aquellas que profundizan en Teología, Metafísica y Filosofía, exclusiva para clientes muy seleccionados o curas frustrados o ahora con los columnistas abogados que dictan cátedras de derecho, que aprovechan los prímiparos para enriquecer sus conocimientos, pero también gente como yo, que me los como, como si se tratara de una rica chuleta de cerdo Zenu y los comento especialmente con uno de ellos, el Doctor Hugo Mendoza, profesor universitario y distinguido abogado que también lee los míos, pues me los critica con propiedad y yo de atrevido le hago observaciones, que él con agrado recibe, porque como humanos que somos nos equivocamos y bastante, pero buena por Hugo y por el Doctor Arregocés Baute, a quienes les pido, al primero, porque el segundo ya está para pensionarse Ad-honoren (¿se escribe así?), en este nuestro emblemático Diario El Pilón que no declinen y continúen con su labor de enseñanza; sería bueno que también lo hicieran los médicos y hablaran del Dengue y el nuevo virus el Kurucunkunca (o algo parecido), los agrónomos y veterinarios que disponen los primeros de mucho tiempo y tienen temas para tratar en esta zona de vocación agropecuaria; los arquitectos e ingenieros que viven hablando siempre y criticando a puerta cerrada, porque son cobardes y cohonestan la corrupción, porque nunca denuncian el delito cometido por funcionarios que les exigen altos porcentajes para adjudicarles un contrato; como me gustaría leer a Toño Maya, que sé que escribe bien y tiene un amplio poder de síntesis hablar sobre los constructores que invaden el espacio público, ante la mirada indiferente de las autoridades, o a William Fuentes Lacouture disertar sobre la malla vial, incluyendo la carrera, creo que la 14 donde él tiene la oficina, a donde casi no se puede llegar en carro.

Son muchas las personas que sin ostentar un título profesional, como yo, la Universidad de la Vida les ha dado conocimiento y experiencias para escribir una columna de estas cada 7 días, por espacio de más de 15 años, que no es miguita, es bastante y tener la satisfacción de encontrar en la calle, en las esquinas y en todas partes a mucha gente que lo saluda con cariño y le manifiesta que lo lee y cuando por alguna circunstancia no lo hago, también preguntan: ¿Oiga y qué paso, por qué hoy se fue en blanco, o ya lo cortaron en El Pilón por escribir tanta M?.

Se acabo el espacio, pero en los renglones que me quedan, voy a felicitar al señor Gobernador, porque las cosas van bien, porque las está haciendo bien y no me equivoqué cuando en alguna oportunidad dije que a este Departamento le faltaba ser manejado por un economista técnico con conocimientos políticos.

Notica: Cuidao Señor Alcalde de La Paz se le va a ocurrir sembrar otra palmita, mire que las que sembró, todas están secas y mutiladas, no las salva nadie, solo Dios y Él está muy ocupado para atender estas pendejadas; el Chorro de Pepe lo que necesita es sombra y las palmas no las dan, solamente producen tuquecas y ratones.