Arrancó en serio el 2015 con algunas incertidumbres como es la respuesta que se espera del señor alcalde Freddy Socarrás a los mototaxistas que le presentaron una propuesta a la Administración Municipal y le dieron plazo hasta el 16 de este mes para que derogue algunos puntos del Decreto 000396 del 29 de diciembre de 2014. Mi opinión es que el decreto debe quedar en firme. Lo que podría tener alguna modificación es la relacionada a la de llevar como pasajeros a familiares.

La segunda incertidumbre es la relacionada (esta columna fue escrita el domingo 11 de enero) con el paro judicial, que lleva casi dos meses de inactividad, y que supuestamente debieron reiniciar labores los despachos judiciales del Palacio de Justicia de Valledupar en el día de ayer martes 13. Esperamos a ver qué pasará, o se levanta o sigue el paro. Lo sabrá Mandrake. Mi opinión: que los juzgados laborales deben reiniciar labores.

Agotados los temas de Navidad, año nuevo y las exitosas fiestas de los 465 años, sería bueno volver al tema político de las precandidaturas a la Gobernación y Alcaldía. En los primeros meses de este año será sin duda de ajetreo político, se elegirá gobernador, alcalde, diputados y concejales. Siempre me he preguntado: ¿Qué tienen estos puestecitos que atraen y amañan tanto? Lo sabrá Dios. Pero algo debe tener el poder y el servicio público que atrae y amaña. Tengo la seguridad que sonarán, por lo menos, 10 precandidatos a la Gobernación y por lo menos 35 a la alcaldía. No hay derecho.

Muchos de ellos dejarán su tranquilidad para hacer política y otros politiquería, se someten muchas veces a los sinsabores y restricciones que deja el servidor público. Se pregunta uno: ¿Será que lo hacen por ambición o por puro ánimo del servicio público? ¿Será que lo hacen por figurar o por negociar puestos o contratos? ¿O será que algunos de los precandidatos que no tienen el perfil o preparación quieren hacer el papel de payasos o del hazmerreír de la comunidad?

Más adelante veremos una gran aglomeración de candidatos, unos buenos, otros mediocres y otros pésimos, pero pésimo es pésimo. Muchos de ellos son más de lo mismo y son los mismos con las mismas. Algunos no tienen carisma, otros nadie los conoce, no tienen votos, nadie les cree, y muchos de ellos están salpicados, en fin, es un irrespeto para Valledupar que algunas de estas personas que suenan estén de precandidatos.

De los nombres que he escuchado, 12 para la alcaldía, se puede decir que dos son buenos, me suenan, el resto es un encarte. Por eso hay que comenzar a seleccionar los candidatos porque por lo menos, quien aspire a la gobernación, por ejemplo, tiene que ser muy bueno, porque superar al actual gobernador Luis Alberto Monsalvo, no es fácil.

Postdata

El relevo es una oportunidad que tienen los mandatarios para recuperar oxigeno ya que están sufriendo un visible desgaste ante la opinión pública por la ineptitud de ciertos funcionarios que no están rindiendo. Los cambios del gabinete, como lo decía un expresidente, significa para los gobiernos, lo mismo que los cambios de sábana para los enfermos: no una curación pero sí un alivio. Este comentario lo hago porque he escuchado cambios en ambos gabinetes. Que Dios ilumine al gobernador y al alcalde para escoger a los nuevos funcionarios.