Las fuertes sequías no merman en la Costa Atlántica, el fenómeno del Niño “no llega” y ya la mitad o más, de varias hectáreas de arroz, maíz y reses están muertas. Se adelantan acciones por parte de Corpocesar, Cuerpo de Bomberos, Emdupar y Oficina de Atención de Riesgo en zonas afectadas y la administración municipal realiza un censo para verificar el estado actual de pérdidas que afectan al sector arrocero.
Preocupado con la actual situación que viven los arroceros del corregimiento de Badillo, al norte de Valledupar, el alcalde Fredys Socarrás Reales inició unas gestiones encaminadas a mitigar el impacto negativo provocado por la sequía en las zonas rurales del municipio.

En el corregimiento de Badillo, el alcalde Socarrás ha liderado reuniones especiales con los arroceros, quienes manifiestan haber perdido más de 2.000 hectáreas que superan los 5.000 millones de pesos, junto con su equipo de trabajo, el mandatario socializó entre otros asuntos, la proyección de obras para satisfacer necesidades básicas en estos sectores y el inicio de un censo para cuantificar el estado actual de las pérdidas en zonas afectadas con el que pretende elevar peticiones al Gobierno Nacional.
Franklin Daza, líder de Badillo, manifestó la importancia de la visita del alcalde, al ver la problemática de cerca, “que esté en nuestra población observando las dificultades de primera mano, esto nos da la oportunidad de plantearles las problemáticas de la comunidad y aprovechando sus buenas relaciones con el Gobierno Nacional nos logre una ayuda”.
Este gremio también aprovechó la reunión para solicitarle al Alcalde que haga gestiones para que se declare la emergencia económica y ambiental, ante la situación por la que atraviesa.
Por Letty Polo Thomas
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