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Informes Especiales - 21 marzo, 2017

Hípica, el deporte que galopa en el Cesar

Hace más de cuatro años comenzaron a construir, en la vía Valledupar- La Paz, el Hipódromo San Francisco, donde la actividad hípica toma fuerza.

Las emociones de la hípica comienzan a tomar fuerza en Valledupar.Joaquín Ramírez/EL PILÓN
Las emociones de la hípica comienzan a tomar fuerza en Valledupar.Joaquín Ramírez/EL PILÓN

Parece quedarse sin garganta. Sus binóculos no pierden de vista la punta de la carrera; se emociona a medida que se acerca el espejo de meta, mientras los jinetes agitan la fusta en busca de un final alentador.

Jorge Humberto Morales Rodríguez lleva 40 años narrando hípica, una pasión que corre por sus venas. Disfruta cada momento, narra una película real en la que involucra un ímpetu alejado de la ficción. Su voz detalla los pasos largos y polvorientos de una caballo ávido de victoria.

No quita los ojos del partidor automático, tampoco de la gatera en donde seis animales alistan el reto para la alargada con su jinete a bordo. “Uno en este tipo de narraciones debe aprenderse el color del caballo, el mandil o la tela que lleva puesta, además de la careta que nos sirve de guía para identificar al animal, ese es el secreto para narrar hípica”, aseguró el locutor antioqueño en medio de la primera jornada realizada este año en el Hipódromo San Francisco, ubicado en el kilómetro 9 de la vía Valledupar- La Paz.

Una lucha codo a codo durante la tercera carrera, arrancó aplausos de elogios en el Hipódromo San Francisco de Valledupar.

Una narración inédita para algunos, pero muy familiar para otros. Su elocuencia y dominio del tema no estuvo tácito en medio de los aplausos y las emociones que desde las gradas transmitieron los amantes a la hípica. Una especialidad inédita para algunos, sin embargo, comienza a abrir espacios en el departamento del Cesar, tal como lo aseguró Juan Ovalle, quien gerencia las actividades hípicas en esta sección del país.

“Este es un hipódromo construido hace cuatro años, con una pista de 1.400 metros, la idea es despertar interés en esta disciplina, ya comenzamos con una escuela en la que tenemos 20 niños del municipio de La Paz, del corregimiento de Varas Blancas y de fincas cercanas. Deben tener más de 15 años y un peso estimado, este es un proceso que hemos emprendido en un escenario que es pionero en la costa”, aseguró.

Sin embargo, no desconoció la necesidad de que el Estado apoye estas actividades que generan empleo, turismo y recreación. “En estos momentos la actividad hípica en Valledupar genera más de 86 empleos, aspiramos llegar a 400. Hemos diseñado un cronograma de competencias para realizarlas cada 15 días, pero después del Festival Vallenato queremos hacerlas todos los sábados”, agregó Juan Ovalle.

El certamen

A las 3:00 de la tarde del sábado anterior iniciaron las competencias con jockeys o jinetes provenientes de Guarne (Antioquia), Villa de Leiva (Boyacá), Venezuela y Bogotá. La corneta de alerta sonó seis veces como señal de carrera.

Las apuestas no se hicieron esperar. Robinson Rodríguez y Ana Karina Sánchez fueron uno de los ganadores al apostarle a Floresta, un caballo jineteado por el venezolano José Valera que salió ganador en la segunda carrera de la tarde.

Atendió al pie de la letra las instrucciones del entrenador Víctor Estrada y al final fue visible su rostro de satisfacción. “Corra cerca, no de ventajas, vamos a imponer el paso desde el inicio, esas fueron las palabras de mi entrenador, gracias a Dios gané. En este deporte hay que tener mucha disciplina y dedicación, las herramientas de protección son importantes a la hora de competir, un chaleco de protección y un casco son necesarios, hace varios años me accidente y estuve retirado, apenas estoy volviendo al plano competitivo”, reconoció el jinete, nacido en Barquisimeto hace 53 años, 35 de ellos dedicados a la hípica.

La primera carrera dejó como ganador al caballo Globo (Venezuela), mientras que en la tercera la victoria fue para Ulises, jineteado por el bogotano Carlos González.

En el hipódromo San Francisco, ubicado en el kilómetro nueve de la vía al municipio de La Paz, se realizaron seis carreras de primer nivel.Joaquín Ramírez/EL PILÓN

La hípica es un deporte relacionado con el mundo ecuestre. Se trata de carreras de caballos con un jinete en un lugar especialmente acondicionado.

 

Este es un deporte que ha existido a lo largo de toda la historia, y hoy en día es fácilmente asociable a las apuestas y el juego.

Las carreras modernas tienen su origen en el siglo XII, cuando los caballeros ingleses retornaron de las cruzadas con caballos árabes. El deporte se tornó verdaderamente profesional alrededor del 1700.

Los asistentes al hipódromo pueden ver las carreras y realizar apuestas, las que se realizan en forma muy dinámica debido a que se efectúan carreras cada 30 minutos. En las tribunas, los asistentes pueden hacer distintos tipos de apuesta, entre las que encontramos la exacta, en la que el apostador debe acertar al orden exacto de llegada de todos los caballos; trifeca, donde debe atinar al orden de llegada de los tres primeros corredores y superfecta, en la que debe acertar los cuatro primeros lugares.

Al menos 20 niños hacen parte del proceso puesto en marcha en Valledupar para fomentar y masificar la hípica en la región.

Por Nibaldo Bustamante/EL PILÓN

 

 

 

 

 

Informes Especiales
21 marzo, 2017

Hípica, el deporte que galopa en el Cesar

Hace más de cuatro años comenzaron a construir, en la vía Valledupar- La Paz, el Hipódromo San Francisco, donde la actividad hípica toma fuerza.


Las emociones de la hípica comienzan a tomar fuerza en Valledupar.Joaquín Ramírez/EL PILÓN
Las emociones de la hípica comienzan a tomar fuerza en Valledupar.Joaquín Ramírez/EL PILÓN

Parece quedarse sin garganta. Sus binóculos no pierden de vista la punta de la carrera; se emociona a medida que se acerca el espejo de meta, mientras los jinetes agitan la fusta en busca de un final alentador.

Jorge Humberto Morales Rodríguez lleva 40 años narrando hípica, una pasión que corre por sus venas. Disfruta cada momento, narra una película real en la que involucra un ímpetu alejado de la ficción. Su voz detalla los pasos largos y polvorientos de una caballo ávido de victoria.

No quita los ojos del partidor automático, tampoco de la gatera en donde seis animales alistan el reto para la alargada con su jinete a bordo. “Uno en este tipo de narraciones debe aprenderse el color del caballo, el mandil o la tela que lleva puesta, además de la careta que nos sirve de guía para identificar al animal, ese es el secreto para narrar hípica”, aseguró el locutor antioqueño en medio de la primera jornada realizada este año en el Hipódromo San Francisco, ubicado en el kilómetro 9 de la vía Valledupar- La Paz.

Una lucha codo a codo durante la tercera carrera, arrancó aplausos de elogios en el Hipódromo San Francisco de Valledupar.

Una narración inédita para algunos, pero muy familiar para otros. Su elocuencia y dominio del tema no estuvo tácito en medio de los aplausos y las emociones que desde las gradas transmitieron los amantes a la hípica. Una especialidad inédita para algunos, sin embargo, comienza a abrir espacios en el departamento del Cesar, tal como lo aseguró Juan Ovalle, quien gerencia las actividades hípicas en esta sección del país.

“Este es un hipódromo construido hace cuatro años, con una pista de 1.400 metros, la idea es despertar interés en esta disciplina, ya comenzamos con una escuela en la que tenemos 20 niños del municipio de La Paz, del corregimiento de Varas Blancas y de fincas cercanas. Deben tener más de 15 años y un peso estimado, este es un proceso que hemos emprendido en un escenario que es pionero en la costa”, aseguró.

Sin embargo, no desconoció la necesidad de que el Estado apoye estas actividades que generan empleo, turismo y recreación. “En estos momentos la actividad hípica en Valledupar genera más de 86 empleos, aspiramos llegar a 400. Hemos diseñado un cronograma de competencias para realizarlas cada 15 días, pero después del Festival Vallenato queremos hacerlas todos los sábados”, agregó Juan Ovalle.

El certamen

A las 3:00 de la tarde del sábado anterior iniciaron las competencias con jockeys o jinetes provenientes de Guarne (Antioquia), Villa de Leiva (Boyacá), Venezuela y Bogotá. La corneta de alerta sonó seis veces como señal de carrera.

Las apuestas no se hicieron esperar. Robinson Rodríguez y Ana Karina Sánchez fueron uno de los ganadores al apostarle a Floresta, un caballo jineteado por el venezolano José Valera que salió ganador en la segunda carrera de la tarde.

Atendió al pie de la letra las instrucciones del entrenador Víctor Estrada y al final fue visible su rostro de satisfacción. “Corra cerca, no de ventajas, vamos a imponer el paso desde el inicio, esas fueron las palabras de mi entrenador, gracias a Dios gané. En este deporte hay que tener mucha disciplina y dedicación, las herramientas de protección son importantes a la hora de competir, un chaleco de protección y un casco son necesarios, hace varios años me accidente y estuve retirado, apenas estoy volviendo al plano competitivo”, reconoció el jinete, nacido en Barquisimeto hace 53 años, 35 de ellos dedicados a la hípica.

La primera carrera dejó como ganador al caballo Globo (Venezuela), mientras que en la tercera la victoria fue para Ulises, jineteado por el bogotano Carlos González.

En el hipódromo San Francisco, ubicado en el kilómetro nueve de la vía al municipio de La Paz, se realizaron seis carreras de primer nivel.Joaquín Ramírez/EL PILÓN

La hípica es un deporte relacionado con el mundo ecuestre. Se trata de carreras de caballos con un jinete en un lugar especialmente acondicionado.

 

Este es un deporte que ha existido a lo largo de toda la historia, y hoy en día es fácilmente asociable a las apuestas y el juego.

Las carreras modernas tienen su origen en el siglo XII, cuando los caballeros ingleses retornaron de las cruzadas con caballos árabes. El deporte se tornó verdaderamente profesional alrededor del 1700.

Los asistentes al hipódromo pueden ver las carreras y realizar apuestas, las que se realizan en forma muy dinámica debido a que se efectúan carreras cada 30 minutos. En las tribunas, los asistentes pueden hacer distintos tipos de apuesta, entre las que encontramos la exacta, en la que el apostador debe acertar al orden exacto de llegada de todos los caballos; trifeca, donde debe atinar al orden de llegada de los tres primeros corredores y superfecta, en la que debe acertar los cuatro primeros lugares.

Al menos 20 niños hacen parte del proceso puesto en marcha en Valledupar para fomentar y masificar la hípica en la región.

Por Nibaldo Bustamante/EL PILÓN