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Columnista - 20 agosto, 2018

Hecha la Ley hecha la trampa

“Legalidad significa que formemos una sociedad de valores, que desde edad temprana formemos en cívica, urbanidad y respeto, para sembrar en los ciudadanos una muralla ética que complementa las enseñanzas del hogar. Construyamos juntos la legalidad enfrentando la corrupción”. Apartes del discurso de posesión del presidente de Colombia Iván Duque Márquez, el cual traigo a […]

“Legalidad significa que formemos una sociedad de valores, que desde edad temprana formemos en cívica, urbanidad y respeto, para sembrar en los ciudadanos una muralla ética que complementa las enseñanzas del hogar. Construyamos juntos la legalidad enfrentando la corrupción”. Apartes del discurso de posesión del presidente de Colombia Iván Duque Márquez, el cual traigo a cuento, porque justo en el día de hoy, el Congreso elegirá al nuevo contralor general de la nación, finalizando así, el proceso de escogencia que por primera vez, tuvo como fase preliminar la evaluación de los aspirantes, por parte de la Universidad Industrial de Santander, quedando finalmente una lista de diez nombres, de donde saldrá el ungido.

El contralor saliente se ha despachado con una frase que prende las alarmas y que invita al Congreso para que realice un análisis ponderado de todas y cada una de las brillantes hojas de vida de los aspirantes, escuche sus propuestas, pero por sobre todas las cosas, recuerde que estamos viendo el ejemplo del presidente Duque, quien conformó su gabinete con criterio técnico, no político, y quien nos invita en su discurso a enfrentar la corrupción.

No sería de buen recibo, como lo menciona Maya Villazón, que se cambien las reglas de juego, para favorecer a un candidato, en detrimento de los demás aspirantes, como ocurrió con la resolución 07, que establecía la inadmisión o exclusión del aspirante que tuviera vínculo dentro del cuarto grado de consanguinidad, segundo de afinidad, o primero civil, respecto de los miembros del Congreso que participen en la elección por mandato constitucional, y que fue modificada por la resolución 08, eliminándose dicha prohibición para favorecer descaradamente a uno de los aspirantes, que dicho sea de paso, pertenece al Centro Democrático, enviando el nefasto mensaje de que seguiremos teniendo más de lo mismo y que continua prevaleciendo el axioma de los corruptos: “Hecha la ley, hecha la trampa”. En el olvido quedará el florido discurso del presidente Duque.

Ahora bien, el próximo 26 de agosto estaremos votando la consulta anticorrupción, cada una de las bancadas ha tomado partido. El Centro Democrático votará en contra, no obstante el presidente Duque, que proviene de dicha bancada, apoyará decididamente la iniciativa, siendo congruente con su discurso, y nos invita a votar por el Sí.
En mi caso particular votaré la iniciativa, e invito a mis lectores a que participen, sin importar cuál sea su opinión, pero les pido también, que lo hagan pensando en el futuro de Colombia.

Por: Darío Arregocés

Columnista
20 agosto, 2018

Hecha la Ley hecha la trampa

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Dario Arregoces

“Legalidad significa que formemos una sociedad de valores, que desde edad temprana formemos en cívica, urbanidad y respeto, para sembrar en los ciudadanos una muralla ética que complementa las enseñanzas del hogar. Construyamos juntos la legalidad enfrentando la corrupción”. Apartes del discurso de posesión del presidente de Colombia Iván Duque Márquez, el cual traigo a […]


“Legalidad significa que formemos una sociedad de valores, que desde edad temprana formemos en cívica, urbanidad y respeto, para sembrar en los ciudadanos una muralla ética que complementa las enseñanzas del hogar. Construyamos juntos la legalidad enfrentando la corrupción”. Apartes del discurso de posesión del presidente de Colombia Iván Duque Márquez, el cual traigo a cuento, porque justo en el día de hoy, el Congreso elegirá al nuevo contralor general de la nación, finalizando así, el proceso de escogencia que por primera vez, tuvo como fase preliminar la evaluación de los aspirantes, por parte de la Universidad Industrial de Santander, quedando finalmente una lista de diez nombres, de donde saldrá el ungido.

El contralor saliente se ha despachado con una frase que prende las alarmas y que invita al Congreso para que realice un análisis ponderado de todas y cada una de las brillantes hojas de vida de los aspirantes, escuche sus propuestas, pero por sobre todas las cosas, recuerde que estamos viendo el ejemplo del presidente Duque, quien conformó su gabinete con criterio técnico, no político, y quien nos invita en su discurso a enfrentar la corrupción.

No sería de buen recibo, como lo menciona Maya Villazón, que se cambien las reglas de juego, para favorecer a un candidato, en detrimento de los demás aspirantes, como ocurrió con la resolución 07, que establecía la inadmisión o exclusión del aspirante que tuviera vínculo dentro del cuarto grado de consanguinidad, segundo de afinidad, o primero civil, respecto de los miembros del Congreso que participen en la elección por mandato constitucional, y que fue modificada por la resolución 08, eliminándose dicha prohibición para favorecer descaradamente a uno de los aspirantes, que dicho sea de paso, pertenece al Centro Democrático, enviando el nefasto mensaje de que seguiremos teniendo más de lo mismo y que continua prevaleciendo el axioma de los corruptos: “Hecha la ley, hecha la trampa”. En el olvido quedará el florido discurso del presidente Duque.

Ahora bien, el próximo 26 de agosto estaremos votando la consulta anticorrupción, cada una de las bancadas ha tomado partido. El Centro Democrático votará en contra, no obstante el presidente Duque, que proviene de dicha bancada, apoyará decididamente la iniciativa, siendo congruente con su discurso, y nos invita a votar por el Sí.
En mi caso particular votaré la iniciativa, e invito a mis lectores a que participen, sin importar cuál sea su opinión, pero les pido también, que lo hagan pensando en el futuro de Colombia.

Por: Darío Arregocés