Con la firma simbólica de un pacto entre estudiantes y el alcalde Fredys Socarrás Reales, el Centro Educativo Hogar del Niño recibió por parte de la Administración Municipal una ludoteca dotada de 70 libros, 24 videos, juegos, material didáctico y mobiliario que permiten que grupos de 40 niños puedan aprender jugando.

Por medio de la Secretaría de Educación Municipal se ejecutó el proyecto de inversión por 200 millones de pesos, que busca generar a más de 600 estudiantes de ocho instituciones, un espacio lúdico y agradable para que puedan aprender y jugar de manera autónoma, estimulando su inteligencia, de esta forma favorecer su desempeño académico y personal.

Los materiales educativos, didácticos y audiovisuales entregados, incluyen entre otros, los libros de gimnasia mental en cinco niveles diferentes y con 10 tipos de juegos constructivos para realizar las actividades que permiten mejorar el razonamiento abstracto, la capacidad de concentración y la persistencia en la solución de problemas.

El alcalde Fredys Socarrás estuvo en la primera entrega que inició a prestar servicio de inmediato. De igual manera, el área de Calidad Educativa de la Secretaría de Educación con el equipo asesor de Ideas Maestras hará el acompañamiento a las instituciones con otras actividades de seguimiento y capacitación.

“Gracias al alcalde Fredys Socarrás Reales por adquirir estos espacios lúdicos pedagógicos que ayudan a mejor la calidad educativa del municipio. Es una herramienta más que necesaria, pero muy eficiente para desarrollar la mentalidad de los niños”, afirmó Rafael Murgas, rector de la institución educativa beneficiada,.

Colegios beneficiados
Entre las instituciones beneficiadas con estas ludotecas se encuentran: Centro Educativo Hogar del Niño, Milciades Cantillo Costa, Villa Corelca, Jardín Infantil Nacional, Loperena Garupal, Bello Horizonte, Educación Primaria de Patillal y Agrícola La Mina.

Más de cinco mil estudiantes de primaria se benefician con las ludotecas que buscan estimular el desarrollo de pensamiento espacial.

Por Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN
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