En Argentina, Paraguay y México lo aclaman como todo un ídolo, eso le da licencia a Amín Martínez para ser uno de los más grandes exponentes del vallenato a nivel internacional, sin desconocer que en Colombia sus éxitos suenan como canciones recién lanzadas.

‘Ceniza fría’, ‘Tierra mala’, Muchacha encantadora’, ‘Me tocó perderte’, ‘Fábula de amor’, todas estas fueron hechas con el respaldo de ‘Los Chiches del Vallenato’, agrupación de la que salió en malos términos. Después de su retiro en 2001, una batalla jurídica ha tenido que librar para cantar las obras que en su voz tienen años de ser himnos en países de América Latina y Centroamérica.

Amín actualmente afronta una demanda interpuesta por el ahora vocalista y único dueño de la agrupación, Osmar Pérez, por utilizar la razón social ‘Los Chiches del Vallenato’. También está demandado ante la Fiscalía General de la Nación. De este y temas como la unión con el rey vallenato, Juan José Granados, así como de su nueva grabación, habló para NUESTRO FOLCLOR el hombre que nació en El Horizonte, una finca ubicada en el corregimiento de Mandinguilla, jurisdicción de Chimichagua, Cesar, pero el destino lo llevó hasta Aguachica donde conformó una agrupación. Luego entró a ‘Los Embajadores del Vallenato’, otro gigantesco grupo de la disquera Fuentes.

¿Cómo se dio su ingreso a la música?

En 1981 se dio la oportunidad de ingresar a la agrupación ‘Los Embajadores del Vallenato’, ahí tuve la oportunidad de conocerme con Pedro Muriel, Germán Carreño, Orlando Mejía, y después me dijeron que podía hacer la solicitud en Discos Fuentes de grabar un disco. La hicimos y se grabó entonces el compacto ‘Enamorado del amor’, al lado de Andrés Guerrero. Cuando fuimos a grabar ese disco existían ‘Los Pechichones’, ‘Los Diablitos’, ‘Los Virtuosos’, y yo dije que quería hacer la agrupación ‘Los Chiches Vallenatos’ porque me seguí por esa línea.

En Discos Fuentes aceptaron y grabé con ellos cinco trabajos. Lamentablemente en esa época no sabía que se debía registrar el nombre como marca y después de todos los éxitos, la disquera me quitó abusivamente el nombre y lo tomó para ellos. La gente no me ha dejado de decir ‘Chiche’, incluso me conocen más que como Amín. Yo ingresé a Los Chiches en 1985 y salí en 2001.

¿Qué pasó entonces con ‘Los Chiches del Vallenato’?

Fuentes le vendió la razón social a Osmar Pérez y está en pleito actualmente. Con mis abogados estamos ante las autoridades porque eso me pertenece, eso nació conmigo y se está comprobando ante la Superintendencia (Industria y Comercio), hasta en la Fiscalía porque Osmar Pérez me tiene demandado en Medellín. Faltan pocas audiencias, creo que dos, para finiquitar todo y de pronto podemos darle una sorpresa a la gente.

¿Cómo ha sido su vida después de ‘Los Chiches’?

La gente no deja de decirme ‘El Chiche’, hoy me presento como Amín ‘El Chiche’. Para suerte mía se hicieron muchos clásicos que no han dejado de sonar, que se mantienen vivos a nivel nacional e internacional.

Usted es uno de los artistas consagrados en el vallenato romántico, modelo que ha perdido fuerza y espacio a nivel radial. ¿Qué puede estar pasando?

Uno debe estar vigente en todo, es esa parte he perdido espacio porque dejé de grabar hace mucho rato, incluso de promocionar porque hasta ahora las redes sociales nos están ayudando; uno se desilusionó mucho de la radio, de muchos locutores, por la cuestión de la payola.

Eso es una realidad de la que muchos artistas no quieren hablar, pero que es la verdad y hay que decirla. El vallenato romántico tiene que volver a su puesto, uno no puede dejar el estilo y por eso estoy grabando con Juan José Granados un trabajo con lo que le gusta al público (…) En México me pegaron 11 canciones y en Colombia no sonó ni una sola, pagué menos que en México y aquí no sonó nada. Yo me la paso en otros países gozando de mis éxitos. Hay canciones de Aníbal Uribe y Felipe Peláez que tienen 15 años de ser número uno en Paraguay y Argentina.

¿Por qué escogió a Juan José Granados?

Este disco se llamará ‘Se completó la historia’ porque yo soñaba con grabar al lado de un rey vallenato. Recientemente estuve con Miguel Santiago, un gran acordeonero y buena persona, pero siempre estuve pendiente de un acordeonero que tuviera el título de rey, se dio la oportunidad con Juan José y lo invité al proyecto, para meterse a la zona del Caribe más profundo, así que con Juan José podré ir a Barranquilla y la sabana.

¿Qué trae en ese nuevo disco?

Estamos grabando en Valledupar, en los estudios Valbuena Records, ya el disco está en pistas y solo estamos organizando unos ajustes. Vienen canciones de compositores como Wilfran Castillo, Fabián Corrales, ‘Tico’ Mercado, Iván Calderón, Rober Oñate, Marciano Martínez, José Antonio Moya y Andrés Bolaño; además de un rencauche de Calixto Ochoa, ‘No llores borracho’.

Texto
Carlos Mario Jiménez
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