Columnista invitado:

Por: Ricardo Quintero Baute
Presidente de la Asamblea Departamental del Cesar

Es importante que la comunidad sepa que esta Asamblea del Cesar (2012-2015), tiene como propósito trabajar de manera indeclinable, durante los próximos cuatro años, de la mano del gobierno departamental. Claro está, sin perder su iniciativa, su independencia y facultad de control político, su capacidad de llamar las cosas por su nombre y de realizar críticas constructivas.
En este primer año de labores, tenemos que ejecutar cuatro actos de vital importancia para el departamento: el primero lo acabamos de cumplir, al posesionar a Luis Alberto Monsalvo Gnecco, como Gobernador; el segundo se refiere al acto de elegir Contralor Departamental; el tercero, y no de menor importancia, será la estructuración y aprobación del  Plan de Desarrollo Departamental,  y el último, la  aprobación del presupuesto del Cesar para la siguiente vigencia fiscal.
Además, la Duma Departamental considera que al señor Gobernador se le debe acompañar de manera contundente en su política de apoyo a los miembros de las Fuerzas Militares y de la Policía Nacional asignados al departamento; los diputados creemos que al gobierno nacional, y en especial al señor Presidente de la República, Juan Manuel Santos Calderón, se le debe exigir que se vigorice nuestra fuerza pública y su presencia en Valledupar, así como en cada uno de los municipios, corregimientos y veredas del Cesar. Ésta debe ser real, oportuna y  efectiva, para que prevenga y evite las acciones delincuenciales de los grupos al margen de la ley.
Nuestro sector agropecuario, que tradicionalmente ha sido el sector representativo de la economía del departamento, debe fortalecerse de una vez por todas. Aquí no queremos presencia de altos funcionarios del orden nacional con pañitos de agua tibia; exíjales señor Gobernador, unas políticas claras acompañadas de recursos para el agro del Cesar.
Un millón 700 mil cabezas de ganado bovino, de las cuales 320 mil son vacas de ordeño que producen un millón 200 mil  litros diarios de leche, hacen que queramos o no,  la ganadería sea importante para el Cesar; mucho más por el hecho de ser el cuarto inventario bovino del país.
En el sector rural también está nuestra fortaleza, por eso, temas como el de la electrificación, la titulación de predios y la asistencia técnica, son de vital importancia.
Capítulo principal de la gestión del señor Gobernador, lo deben constituir los 6 mil 364 kilómetros de vías en el departamento, de los cuales 5 mil 407 kilómetros corresponden a vías terciarias,  las mismas que no se encuentran en buen estado, y sin las cuales es imposible hablar de productividad y competitividad.
Tendremos que trabajar en sectores de vital importancia como la educación, salud, recreación y deporte, medio ambiente, entre otros, que ya tendremos oportunidad de revisar de manera detallada.
En lo personal, considero que el Gobierno Departamental  debe reformular el Estatuto Departamental de Rentas, y así  fortalecer los tributos que nos permitan obtener más ingresos para hacer mayor inversión; además, estudiar la posibilidad de buscar la  recategorización del departamento.
La Asamblea Departamental considera que al alcalde del municipio de Valledupar,  Fredys Socarras Reales, debe apoyársele, para que la capital del departamento recobre su condición de ciudad intermedia de avanzada, y fortalezca su seguridad ciudadana, infraestructura y movilidad. La intención de rodear al burgomaestre de los vallenatos debe ser permanente.
Cesarenses, basta ya de divisiones; señores congresistas, alcaldes y concejales municipales; sectores de la producción, de la academia y sociedad civil; la honorable Asamblea Departamental los invita a trabajar mancomunadamente por el desarrollo del departamento.

De la mano con el gobernador