La indignación que ayer expresó la comunidad del municipio de San Juan del Cesar para rechazar la muerte de una de sus pobladoras y pedir más seguridad, es la réplica de lo que ocurre en varias poblaciones colombianas, situación de la que no escapan los otros municipios guajiros. Tuvo que ocurrir la muerte violenta e […]
La indignación que ayer expresó la comunidad del municipio de San Juan del Cesar para rechazar la muerte de una de sus pobladoras y pedir más seguridad, es la réplica de lo que ocurre en varias poblaciones colombianas, situación de la que no escapan los otros municipios guajiros.
Tuvo que ocurrir la muerte violenta e infortunada de la señora Remedios Vergara Cuello, de 72 años, para que salieran a las calles a pedir justicia y más seguridad, a pesar de que ya venían ocurriendo hechos delictivos que han afectado notablemente a los sanjuaneros. Este es un hecho que merece todo el repudio social y por el que se pide resultados en las investigaciones.
Este caso se puede decir que se convirtió en el ‘Florero de Llorente’, la gota que rebosó la copa de los sanjuaneros, que no solo salieron en un cortejo fúnebre a despedir a la conocida mujer de la tercera edad, sino a protestar y a pedir a las autoridades más acción, más control y seguridad en la población.
San Juan del Cesar es un municipio del sur de La Guajira que tiene más de 40 mil habitantes y solo cuenta con 24 policías, que no siempre están en servicio porque mientras un grupo descansa, otro trabaja. En las calles si acaso hay cerca de una decena prestando seguridad, otros están asignados a puntos específicos y algunos deben trasladarse hasta la zona rural.
Aseguran los sanjuaneros que los actos delictivos han aumentado en su población, que ya no se sienten seguros en las casas, menos en la calle. Es tan abrumadora la situación, que hasta los funcionarios públicos han sido víctimas de atracos.
A pesar de esta situación, las autoridades aseguran que no existen denuncias de los hechos porque la comunidad prefiere no interponerlas cuando son víctimas, ni siquiera llaman a la Policía. EL PILÓN conoció que el alcalde Luis Daza Mendoza ha pedido en reiteradas ocasiones en los consejos de seguridad que se aumente el pie de fuerza y que a través del Fondo Cuenta, se compren cámaras de seguridad, solicitud que no ha contado con el apoyo de los representantes de la Fuerza Pública y el Ejército Nacional que tienen asiento en dicho consejo (incluso aseguran que estos prefieren que les compren medios de transporte).
Es el momento de revisar la seguridad de los sanjuaneros, que la muerte de la señora Remedios Vergara no quede en la impunidad y que la voz de la comunidad sanjuanero no se ahogue en las aguas del río Cesar.
La indignación que ayer expresó la comunidad del municipio de San Juan del Cesar para rechazar la muerte de una de sus pobladoras y pedir más seguridad, es la réplica de lo que ocurre en varias poblaciones colombianas, situación de la que no escapan los otros municipios guajiros. Tuvo que ocurrir la muerte violenta e […]
La indignación que ayer expresó la comunidad del municipio de San Juan del Cesar para rechazar la muerte de una de sus pobladoras y pedir más seguridad, es la réplica de lo que ocurre en varias poblaciones colombianas, situación de la que no escapan los otros municipios guajiros.
Tuvo que ocurrir la muerte violenta e infortunada de la señora Remedios Vergara Cuello, de 72 años, para que salieran a las calles a pedir justicia y más seguridad, a pesar de que ya venían ocurriendo hechos delictivos que han afectado notablemente a los sanjuaneros. Este es un hecho que merece todo el repudio social y por el que se pide resultados en las investigaciones.
Este caso se puede decir que se convirtió en el ‘Florero de Llorente’, la gota que rebosó la copa de los sanjuaneros, que no solo salieron en un cortejo fúnebre a despedir a la conocida mujer de la tercera edad, sino a protestar y a pedir a las autoridades más acción, más control y seguridad en la población.
San Juan del Cesar es un municipio del sur de La Guajira que tiene más de 40 mil habitantes y solo cuenta con 24 policías, que no siempre están en servicio porque mientras un grupo descansa, otro trabaja. En las calles si acaso hay cerca de una decena prestando seguridad, otros están asignados a puntos específicos y algunos deben trasladarse hasta la zona rural.
Aseguran los sanjuaneros que los actos delictivos han aumentado en su población, que ya no se sienten seguros en las casas, menos en la calle. Es tan abrumadora la situación, que hasta los funcionarios públicos han sido víctimas de atracos.
A pesar de esta situación, las autoridades aseguran que no existen denuncias de los hechos porque la comunidad prefiere no interponerlas cuando son víctimas, ni siquiera llaman a la Policía. EL PILÓN conoció que el alcalde Luis Daza Mendoza ha pedido en reiteradas ocasiones en los consejos de seguridad que se aumente el pie de fuerza y que a través del Fondo Cuenta, se compren cámaras de seguridad, solicitud que no ha contado con el apoyo de los representantes de la Fuerza Pública y el Ejército Nacional que tienen asiento en dicho consejo (incluso aseguran que estos prefieren que les compren medios de transporte).
Es el momento de revisar la seguridad de los sanjuaneros, que la muerte de la señora Remedios Vergara no quede en la impunidad y que la voz de la comunidad sanjuanero no se ahogue en las aguas del río Cesar.