A pesar de la denuncia publicada por el diario EL PILÓN relacionada con un lote rodeado de maleza ubicado en el barrio Alfonso López, en la calle 13 con carrera 15, la comunidad sigue a la espera de su intervención, toda vez que el descuido de este predio ha generado inconvenientes para los vecinos, al convertirse en un foco de mosquitos, malos olores e inseguridad.

Aunque en el barrio Alfonso López se encuentren tres lotes en las mismas condiciones, con residuos de escombros, podas y deshechos humanos, el más crítico, según sus habitantes, es el ubicado en cercanías a los estaderos de la calle 12.

Gladys Margarita Peralta, residente del sector, ha manifestado en repetidas ocasiones que ya transcurrió mucho tiempo desde la solicitud de limpieza del lugar, tanto a los propietarios como a la Secretaría de Gobierno de Valledupar. La preocupación es que termine siendo usado como refugio de delincuentes, por lo que solicita una pronta visita.

“La verdad es que ya hemos hecho un llamado en la alcaldía, y a la Policía porque a veces vemos que entran jóvenes ahí a fumar marihuana, vinieron e hicieron una inspección y no han vuelto para darnos solución. Rogamos que nos colaboren. No esperemos que el lugar sea usado con otro fines, además del de botadero de basuras”, dijo la ciudadana.

Esta situación no preocupa solo a los habitantes del lugar, sino a las personas que a diario transitan por la citada calle, algunos temen ser sorprendidos por algún delincuente, porque además de estar enmontado carece de iluminación y perfectamente puede ser la guarida de los malhechores.

Rosalba Arzuaga asegura que hace más de seis meses no se poda el lote y “cuando paso por aquí, siempre pienso que va a salir una culebra o alguien a robar, evito en lo posible no hacerlo en las noches porque además de la cantidad de basura, la oscuridad de ese lugar da sensación de inseguridad, además da mala imagen”.

El lugar lleva varios meses emontando y el olor que emana es nauseabundo. Vecinos aseguran que el lote es propiedad del señor Mauricio Sosa, a quien EL PILÓN trató de contar, pero no fue posible. El llamado que hace la comunidad al propietario del predio es que se encargue de su limpieza y cerramiento del terreno.

Por Jennifer Polo / EL PÍLÓN